La policía detuvo ayer a tres personas acusadas de haber difundido a través de internet imágenes de los cadáveres mutilados en los trágicos atentados ocurridos en Madrid del pasado 11 de marzo. Los tres detenidos están vinculados a empresas privadas dedicadas al transporte sanitario que acudieron al lugar de los hechos después del brutal atentado que se cobró la vida de 191 personas.

CONFESION En concreto, según informó el Ministerio del Interior, la operación, que fue ordenada por el juez de la Audiencia Nacional Juan del Olmo, ha culminado con la detención del técnico sanitario C. M. C., de 30 años, conductor de una ambulancia subcontratada; de su compañero F. J. C. Z., de 28 años; y de S. R. M. D., de 33 años, también vinculado a los servicios de transporte sanitario. Los tres han reconocido su implicación.

La investigación comenzó el pasado día 22 de octubre, cuando el juez de la Audiencia Nacional ordenó a la brigada de investigación tecnológica de la policía que bloqueara la distribución y exhibición en internet de 34 imágenes de las víctimas, y un vídeo con planos que mostraba cadáveres alineados en un andén. Las imágenes estaban en una web alojada en un servidor de EEUU.

En apenas una hora, la policía consiguió, gracias a la colaboración de los principales proveedores de internet, impedir el acceso desde España a las imágenes.

CAMARAS IDENTIFICADAS El examen técnico de las imágenes y del vídeo permitió determinar las máquinas digitales con las que habían sido efectuadas las tomas en el lugar de los hechos. Igualmente, como resultado del examen de la página web se observó la existencia de otro enlace que llevaba a ocho imágenes más, en este caso de un accidente de circulación en España en el que aparecía un vehículo volcado con una persona atrapada en su interior, y otras del cadáver de una menor.

La policía pudo comprobar, asimismo, que todas las fotografías del atentado publicadas en internet habían sido realizadas en la estación de El Pozo y en la calle de Téllez. La policía averiguó que a esas zonas habían acudido ambulancias del Servicio Madrileño de Salud (Sermas) y del Servicio de Urgencias Médicas de Madrid (Suma).

La investigación determinó finalmente que uno de los conductores de una ambulancia subcontratada por Sermas era el autor de las imágenes del accidente de tráfico, y se comprobó que esta misma persona estuvo el 11 de marzo en el lugar de la matanza. Además, en el registro de su casa se localizó una de las cámaras utilizadas para tomar las imágenes. Posteriormente fue detenido otro compañero que había realizado más fotografías y un tercero, también conductor sanitario.