Marruecos informó hace dos semanas a una delegación judicial española encabezada por el juez de la Audiencia Nacional Baltasar Garzón de que su policía no tiene pistas de unos 400 integristas de los 600 que fueron entrenados en Afganistán, Chechenia y Bosnia en los últimos años, según informó ayer El País.Sólo 200 de estos terroristas están identificados y controlados, mientras que el resto se encuentra en paradero desconocido. Según Rabat, actualmente existen en Marruecos 100 células integristas, compuestos por grupos de entre cinco y nueve personas, dispuestas a cometer atentados. Este dato lo comentó precisamente el juez Garzón el pasado 16 de julio durante su declaración ante la comisión que investiga los atentados del 11-M.Tanto la policía como los jueces españoles coinciden en que la principal amenaza del terrorismo integrista en España procede de Marruecos. De hecho, 40 de los 61 presuntos autores o colabora- dores de la matanza del 11-M en Madrid son naturales de las ciudades de Tánger y Tetuán.