José María Aznar afirmó ayer que todos los documentos de los servicios secretos correspondientes a los años de gobierno del PP están en el Centro Nacional de Inteligencia (CNI) y, por tanto, a disposición del Ejecutivo del PSOE. No negó, sin embargo, que se llevara copias de informes reservados al abandonar la Moncloa, lo que está prohibido por ley.
El expresidente, que llegó ayer a Colombia para promocionar su libro Ocho años de Gobierno , se refirió en diversas entrevistas con medios locales a la acusación de que se apropió indebidamente de documentos secretos del CNI sobre la autoría de los atentados del 11-M.
EL FUTURO Del futuro del expresidente habló ayer en España Mariano Rajoy. El secretario general del PP consideró una falta de seriedad plantear la incorporación de Aznar al próximo equipo de dirección del PP, porque está por voluntad propia "fuera de la vida política".
El líder de los populares hizo esta afirmación durante la rueda de prensa que ofreció en la sede del partido para hacer un balance de los primeros 100 días del Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero. Tras despacharse a gusto contra el Ejecutivo socialista, se le preguntó si Aznar puede tener cabida en la estructura del Partido Popular que surja del congreso nacional que celebrará el partido en octubre próximo.
"La posición del señor Aznar es muy conocida. El ha dicho que no se va a presentar a la presidencia del partido y que no está en la vida política, que se dedica a otro tipo de actividades", respondió Rajoy. "Por lo tanto no es cuestión. ¿Qué va a ser? ¿Secretario general adjunto? ¿Vicesecretario? No me parece una cosa seria, y el señor Aznar me ha manifestado en numerosas ocasiones, como al conjunto de la opinión pública española, qué él no está en la actividad política".
SOLO EN LA CRITICA También ayer el Partido Popular pidió en la Diputación Permanente de la Cámara que el ministro del Interior, José Antonio Alonso, comparezca ante la comisión de Interior para explicar cómo van las investigaciones. PSOE, CiU, ERC, PNV e IU-ICV rechazaron la propuesta y se indignaron por considerar que los populares pretendían "ningunear" a la comisión parlamentaria investigadora. Además, todos los grupos parlamentarios del Congreso, menos Coalición Canaria, acusaron ayer al PP de "enredar" para que no se conozca la verdad sobre la masacre del 11-M.
