La Casa Blanca describió ayer a España como un "valioso aliado de la OTAN y miembro de la Unión Europea" y resaltó su "importante contribución" al "fortalecimiento de la paz y la seguridad en Afganistán". Estas referencias figuran en un comunicado que anuncia oficialmente la próxima reunión que mantendrán en Crawford (Tejas) el presidente George W. Bush y su esposa con los reyes Juan Carlos y Sofía.

La nota no hace ninguna alusión a la intervención española en el conflicto de Irak, que el Gobierno socialista interrumpió al retirar las tropas del país árabe. La decisión del presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, originó las fricciones actuales en las relaciones bilaterales, que el Rey pretende limar en su almuerzo con Bush el próximo día 24 de noviembre.

Por su parte, George Bush padre, expresidente de Estados Unidos, llegó ayer a España en visita privada. A diferencia de otras visitas realizadas en anteriores ocasiones, y en las que se reunió con los entonces jefes del Ejecutivo español Felipe González y José María Aznar, en esta ocasión no está previsto que el expresidente mantenga ningún encuentro con Rodríguez Zapatero.