Con el acuerdo de PSOE y Unidas Podemos para un Gobierno de coalición en el horno, el calendario hacia la investidura se pone en marcha. Estas son las fechas clave en el camino hacia ese nuevo Ejecutivo, que bien puede ponerse en marcha antes de las vacaciones de Navidad si Pedro Sánchez y Pablo Iglesias logran recabar los apoyos que necesitan entre los partidos minoritarios. La posición de ERC puede determinar el éxito o el fracaso.

Lunes 18 de noviembre

Los diputados empiezan a entregar sus credenciales para recoger las actas

Martes 3 de diciembre

Sesión constitutiva de las nuevas Cortes. Los diputados juran o prometen la Constitución. Se eligen los miembros de la Mesa del nuevo Congreso y quién ocupa la presidencia.

A partir del 3 de diciembre

Una vez constituidas las Cortes, se formalizan los grupos parlamentarios. Según el reglamento, en un plazo de cinco días.

También tras esa fecha, el Rey puede abrir la ronda de consultas. No es necesario que se hayan constituido los grupos parlamentarios para que reciba en el palacio de la Zarzuela a los responsables de las formaciones políticas. Después de explorar las posiciones, Felipe VI convoca al presidente del Congreso, que pone fecha a la investidura.

A partir del 10 de diciembre

Celebración del pleno de investidura. Si todo va rápido será esa segunda semana de diciembre; si los trámites se retrasan, podría ser la tercera.

En primera votación se necesita mayoría absoluta. En la segunda, 48 horas después, bastan más ‘síes’ que ‘noes’ para ser elegido presidente del Gobierno.

Dos posibilidades

A partir de la votación de investidura, se abren dos escenarios:

Vísperas de Navidad: Si Pedro Sánchez logra la investidura como presidente del Gobierno, podría nombrar de inmediato a sus ministros. Con un Ejecutivo ya en el banco azul se podrá celebrar la Sesión Solemne de Apertura de Legislatura, presidida por el Rey, lo que no se espera hasta enero.

Mediados de febrero: Por el contrario, si el líder del PSOE no saca adelante la investidura, tras la primera votación fallida empieza a contar un plazo de dos meses para posibles nuevos intentos.

¿Nuevas elecciones?

Si Pedro Sánchez fracasa en su intento de investidura en diciembre, y si no se logra una alternativa viable en los dos meses posteriores, habría que disolver las Cortes nuevamente a mediados de febrero para acabar celebrando otras elecciones generales, que como pronto serían el 5 abril.