El mismo día en que entraba en vigor la ley que prohíbe a las autonomías complementar las pensiones, el Gobierno catalán plantó cara al Ejecutivo de José María Aznar. El consejero jefe, Josep Lluís Carod-Rovira, afirmó ayer que el tripartito presentará próximamente en el Parlamento de Cataluña un proyecto de ley de complemento de las pensiones al considerar que muchas de ellas son "muy bajas" e incluso "vergonzantes y vergonzosas".

El pago de esta ayuda es uno de los puntos destacados del pacto de izquierdas que sellaron el PSC, ERC e ICV-EUiA. En línea con este compromiso, Carod dijo que el objetivo de la futura ley es acabar con la "discriminación" actual y garantizar que los pensionistas percibirán, al menos, el 80% del salario mínimo interprofesional, que es de 460,5 euros mensuales (unas 76.600 pesetas). El proyecto del Gobierno tripartito, según explicó, también prevé que esta ayuda se revise cada año en función del aumento del coste de la vida en Cataluña.

El consejero jefe aseguró que la ley impulsada por el Gobierno de José María Aznar es "discriminatoria" porque no tiene en cuenta que el índice de precios de consumo es diferente en cada comunidad.

En este sentido, argumentó que Cataluña tiene los productos básicos más caros de España, como ocurre con la vivienda, la ropa o el transporte. "Esto provoca que, año tras año, se produzca una acumulación que hace que tengamos una verdadera necesidad de complementar las pensiones", destacó.

MENTALIDAD UNIFORMISTA Por ello, advirtió al PP de que el Gobierno catalán no se arredra porque su prioridad es atender las necesidades de los pensionistas, "que son víctimas de este sistema de pensiones injusto".

Carod saludó que el presidente andaluz, el socialista Manuel Chaves, también haya mostrado su intención de seguir pagando ayudas a las pensiones asistenciales. "Celebramos que hayan otros que alcen la voz contra esta mentalidad uniformista y centralista del PP", manifestó, para agregar que el Gobierno tripartito plantaría cara aunque estuviera solo en esta cruzada.

UNA "AFRENTA" El PP, con el único apoyo de Coalición Canaria, aprobó a finales de noviembre en el Congreso el cambio en la ley general de la Seguridad Social para evitar el pago de estos complementos. El Gobierno afirmó que el propósito de esta norma es garantizar "los principios de universalidad, unidad, solidaridad e igualdad" en el sistema de la Seguridad Social. El diputado popular Tomás Burgos argumentó que "complementar pensiones en ciertas regiones" supone "una afrenta a los mayores".

La modificación de la ley fue la respuesta de Aznar al Tribunal Constitucional, que dio la razón a Andalucía, la primera comunidad en establecer una paga compensatoria a sus jubilados, y a Cataluña. En 1999 la Junta andaluza estableció ayudas para los pensionistas con subsidios no asistenciales de jubilación e invalidez. Cataluña siguió su ejemplo y CiU fijó un complemento para las personas viudas con rentas bajas.