Cerca de 1.400 presos de centros penitenciarios de toda España que se encuentran en la etapa final de su condena participarán en el programa 'Reincorpora', de inserción socio-laboral, que les permite estar formados en oficios como el de la hostelería o los servicios. Este plan anual, que ha sido renovado por el Ministerio del Interior y la Fundación La Caixa, cuenta con una inversión de 4,1 millones de euros, destinados a facilitar itinerarios de inserción sociolaboral a 1.360 internos.

Es el caso del taller de cocina en el que se encuentra José Luis, de 45 años, quien ha explicado en la presentación de la renovación del programa que se siente "motivado e ilusionado con un plan que tiene salidas". "Ha sido todo muy positivo. En el restaurante donde hemos hecho las prácticas no había discriminación y el ambiente de trabajo era armonioso", ha señalado Mariano tras más de dos décadas alejado del mundo laboral.

Paco y Daniel, dos jóvenes que no habían tenido contacto con la hostelería, se han mostrado agradecidos "por la oportunidad así como por las ayudas recibidas durante la formación y las prácticas".

El plan Reincorpora se compone de tres fases: un proceso de formación teórica y práctica, realización de un proyecto de servicio solidario vinculado a la formación y un programa de integración laboral que ya ha facilitado más de 76.000 puestos de trabajo. "El año pasado, el 42% de los internos fueron contratados y esperamos que en la presente edición ascienda al 50", asegura la jefa del servicio de inserción laboral de instituciones penitenciarias, Ana Domínguez.

En el último año, los ámbitos de formación y contratación principales fueron la hostelería con un 48%, servicios con un 32%, agricultura con un 14% y otras ocupaciones relacionadas con la industria, con un 6%. Desde la puesta en marcha del proyecto, en el 2005, la entidad ha impulsado la formación y reinserción laboral de más de 12.200 reclusos.