El servicio de información del Gobierno de Gibraltar en España se ha quejado de que un patrullero de la Armada, la corbeta 'Infanta Elena', ha navegado frente a sus costas con el himno de España sonando a través de un altavoz a todo volumen.

A través de su cuenta de Twitter, este servicio ha difundido un vídeo grabado por un particular, con un mensaje añadido: "Navegando entre la poca vergüenza y el infantilismo, ahí tenemos al 'Infanta Elena' manifestando las glorias de España en aguas británicas frente al levante de Gibraltar".

Tras conocer este episodio, el Reino Unido expresó su intención de presentar "una protesta diplomática formal ante las autoridades españolas" por la, a su juicio, "incursión" en aguas de Gibraltar, según informó a la agencia Europa Press una portavoz de la Embajada británica en Madrid.

Según la versión de esta portavoz, "la Royan Navy respondió ante el buque", tras lo cual "abandonó las aguas territoriales británicas en Gibraltar".

Fuentes del Ministerio de Defensa español, por su parte, alegaron que la corbeta estaba navegando "por aguas españolas" cuando reproducía el himno nacional.

La disputa por las aguas territoriales

El foco del problema es que, mientras Reino Unido y el Peñón consideran "aguas territoriales británicas de Gibraltar" el mar que rodea a la colonia, España mantiene que esas aguas son de soberanía española porque no se cedieron en el Tratado de Utrecht de 1713, sino que este afecta solo la ciudad, el castillo y "su puerto, defensas y fortalezas".

Además, España defiende que la Convención sobre el Derecho del Mar, que reconoce aguas territoriales a todos los países ribereños, solo se aplica a los Estados, no a Gibraltar, que es una colonia.

Esta discrepancia ha sido objeto de frecuentes incidentes por lo que Gibraltar califica de "incursiones" en sus aguas. El Peñón considera que los barcos españoles pueden atravesar esas aguas si lo hacen en línea recta siguiendo su rumbo pero en esta ocasión no ha sido así.