La Crida, la asociación y partido político creada por el 'expresident' Carles Puigdemont, se resiste a diluirse en Junts per Catalunya. El futuro de esta entidad lo establecerán sus asociados, ha apuntado el portavoz Toni Morral, tras una reunión de la dirección en Bruselas presidida por Puigdemont. A la espera de la eventual unificación del espacio posconvergente, la Crida mantiene todas las puertas abiertas.

Si hace unas semanas el presidente de la Crida, Jordi Sànchez, apostaba en una entrevista a EL PERIÓDICO, por disolver la Crida en un nuevo partido unificado, Morral ha marcado distancias y ha dicho simplemente que la Crida quiere ser "útil" y que todas las opciones están sobre la mesa, incluida la de que esta asociación concurra a las elecciones.

En todo caso, Morral ha reclamado la vigencia de la Crida como organizacion política y ha anunciado que celebrará su segundo congreso el próximo año, en febrero o marzo.

La reunión de Bruselas ha tenido lugar el día siguiente de la que celebró Puigdemont con Junts per Catalunya. Y se da la circunstancia que destacados dirigentes como Albert Batet o Elsa Artadi esten en ambas organizaciones.