Las fuerzas de seguridad francesas han localizado en la vivienda de Salies-de-Béarn, en la que vivían Soledad Iparragirre, Anboto, y Mikel Albisu, Antza, el archivo financiero de la banda, un auténtico banco de ETA del que se encargaba la mujer. Este filón podría desentrañar las operaciones económicas de la banda, incluidos los pagos a comandos y los cobros del impuesto revolucionario .

La policía francesa ha podido copiar a varios ordenadores portátiles la abundante información contenida en los discos duros de cuatro ordenadores hallados en el domicilio. Algunos estaban encendidos cuando los agentes irrumpieron, por lo que el acceso al sistema fue sencillo, aunque disponían de un dispositivo para efectuar el borrado automático de todos los datos, que la pareja no tuvo tiempo de activar.

RED DE EXTORSION Del estudio de esta documentación se espera obtener datos para acabar con la red del impuesto revolucionario, así como para cortar el suministro económico que la banda proporciona a los comandos y a los activistas en la reserva. Los primeros indicios apuntan a Soledad Iparragirre como autora de la última remesa de cartas de extorsión a empresarios vascos y navarros. La policía sospecha que la detenida dirigía el aparato financiero de ETA desde el 2001, cuando falleció el anterior responsable, José Luis Arrieta Zubimendi, Azkoiti .

Además de listados con nombres, direcciones y teléfonos, en el ordenador de Antza se habría hallado también minuciosa información sobre contactos políticos, como la entrevista con el máximo dirigente de ERC, Josep Lluís Carod-Rovira.

EL CAPITAL El principal objetivo de las fuerzas de seguridad españolas y francesas es descubrir ahora un zulo especial, denominado en el argot etarra Txoriek (pájaros), en el que se encontraría todo el dinero del que dispone la banda. Al iniciarse el registro de la vivienda de Salies-de-Béarn, los agentes confiaban en hallar este escondite, por lo que solicitaron la colaboración de un geólogo para detectar movimientos de tierras. Lograron así localizar un bidón enterrado con miles de euros, pero el dinero que se supone que se acumula en el Txoriek es muy superior.

PRESION SOSTENIDA Las fuerzas de seguridad creen que el estado en el que fueron hallados los dos misiles tierra-aire de ETA, embalados en sendas cajas de cartón, indica que éstos no tenían aún un destino concreto. El ministro del Interior, José Antonio Alonso, felicitó a la Guardia Civil y celebró la operación como "un éxito conjunto", aunque pidió que no se baje la presión "hasta que se acabe definitivamente con ETA".