El ministro del Interior, Angel Acebes, informó ayer de que los cinco detenidos --tres marroquís y dos indios-- por su presunta relación con la matanza del 11-M, se encuentran bajo el peso de la ley antiterrorista, que permite prorrogar su incomunicación durante cinco días.

La medida fue decretada por el juez de la Audiencia Nacional Juan del Olmo, que dirige la investigación y podrá tomarles testimonio el jueves próximo.

En su primera comparecencia de ayer, Acebes trató de justificar su empecinamiento en que los autores del atentado eran de ETA. "En las primeras horas pensábamos y teníamos esa convicción", dijo. Agregó que la investigación "está siendo muy compleja y hay que seguir todas las vías". El ministro explicó que los marroquís arrestados --Jamal Zougam, Mohamed Chaoui y Mohamed Bekkali Boutaliha-- tienen antecedentes policiales y que uno de ellos puede estar relacionado con un homicidio cometido en España.

Aseguró que se sigue investigando el vídeo encontrado el sábado por la tarde en la que un tipo llamado Abu Hujan Al Afgani, que dice ser portavoz militar de Al Qaeda en Europa, reivindica la masacre en nombre de esa organización terrorista. Ningún servicio de inteligencia europeo tenía identificado al supuesto portavoz, dijo Acebes.