Cinco días después de publicar un mensaje en Twitter que desató las críticas de toda la derecha y del PSOE, Pablo Echenique ha condenado, por primera vez y de manera explícita, las protestas violentas que se han vivido en los últimos días en varias ciudades españolas por la condena al rapero Pablo Hasél. No obstante, el portavoz parlamentario de Unidas Podemos ha señalado que se ha originado un "falso debate" en torno a la posición de su formación y del Gobierno en su conjunto respecto a estos incidentes porque resulta obvio que están en contra de estos altercados.

El pasado miércoles, coincidiendo con la segunda noche de protestas por Hasél, el dirigente morado publicó un mensaje en las redes sociales mostrando su apoyo "a los jóvenes antifascistas que están pidiendo justicia y libertad de expresión en las calles". Además, Echenique cargó contra la policía y la "violenta mutilación del ojo de una manifestante". Según dijo, estos hechos debían ser investigados y se debería debería "depurar responsabilidades con contundencia".

Estas palabras desencadenaron las críticas de PP, Vox y Cs que exigieron su dimisión y pidieron al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, que cesara al vicepresidente segundo, Pablo Iglesias, por no corregir a Echenique y condenar la violencia. La respuesta del portavoz parlamentario fue publicar un vídeo en el que se podía observar a un grupo de antidisturbios cargando contra varios manifestantes y una fotografía de la mujer que perdió un ojo en una protesta en Barcelona por el impacto de una bala de goma.

Un "debate falso"

Sin embargo, Echenique ha condenado este lunes la violencia de los últimos días. Tras ser cuestionado en varias ocasiones en una entrevista en TVE, el dirigente morado ha afirmado que no le gustan "ese tipo de acciones" y que "todo el mundo", rechaza la quema de contenedores y la rotura del mobiliario público. A este respecto, ha insistido en que el 99% de la gente, entre ellos los dirigentes de Unidas Podemos, están en contra de las incidentes violentos. Aun así, ha dejado claro que no se va a sumar a la "criminalización" de los jóvenes que exigen una mayor protección de la libertad de expresión.

Además, ha señalado que le parece "una ridiculez" que se exija a Sánchez salir a decir que le parece mal la quema de contenedores. "¿Se sospecha que al presidente del Gobierno ole parece bien que se quemen contenedores?", ha preguntado con ironía.

Nuevos reproches

La posición adoptada por Echenique, y que después defendieron otros miembros de Unidas Podemos, también provocó un choque en el seno del Gobierno. Los socialistas dejaron claro que ningún tipo de violencia es legítimo y afearon la actitud a sus socios. Este lunes, el secretario de Organización del PSOE y ministro de Transportes, José Luis Ábalos, ha vuelto a sentenciar que "la violencia está en las antípodas de la libertad de expresión" y que "ninguna reivindicación, por muy legítima que sea, se defiende a pedradas o prendiendo fuego a las calles".

Sobre el mensaje del dirigente morado, Ábalos ha dicho que tanto el portavoz de Unidas Podemos con sus palabras como el vicepresidente segundo "con sus silencios" deben ser "plenamente conscientes" de sus intenciones y de que representan las "concepciones" de su partido. "Nadie tiene que explicar en qué consiste la libertad de expresión porque hemos luchado mucho para que exista", ha sentenciado el ministro socialista en un mensaje claro para sus aliados.