El Ejército inició ayer labores de vigilancia en los polígonos químicos Norte y Sur de Tarragona para garantizar su seguridad exterior en ejecución del plan de control de puntos estratégicos anunciado por el Gobierno tras el atentado terrorista del 11 de marzo en Madrid, según confirmó la Delegación del Gobierno en Barcelona.

Unos 50 soldados acamparon en el paraje de la Granja dels Frares, en El Morell (Tarragon¨s). "Su función es realizar prácticas de control bajo las órdenes de la Guardia Civil, que tiene las competencias de la lucha antiterrorista", manifestó Angel Sagardoy, subdelegado del Gobierno en Tarragona. Sagardoy avanzó que posiblemente otro grupo de soldados se desplazará próximamente a las áreas nucleares de Ascó y Vandell²s, que ya vigila la Guardia Civil.

Los militares comunicaron a responsables de Repsol que se trataba de reforzar la seguridad en el exterior de las fábricas y no pidieron la aplicación de medidas especiales en el interior. "Nosotros seguimos con los dispositivos de vigilancia habituales", indicó Josep Bertran, portavoz de Repsol Petroleo.

Pere Guinovart, alcalde de El Morell, desveló que un oficial del Ejército y Angel Sagardoy le telefonearon el miércoles para solicitarle el uso de las instalaciones de la Granja dels Frares, donde hay lavabos y agua corriente. "Me dijeron que vigilarían el complejo industrial y que, en principio, estarían unas dos semanas", agregó. Sin embargo, fuentes gubernamentales no descartan que el dispositivo se mantenga durante la boda del Príncipe Felipe y el F²rum de les Cultures de Barcelona.

ACOSTUMBRADOS Trabajadores de Repsol Química no se extrañaron ayer al ver a primera hora de la mañana a los soldados inspeccionando el lecho del río Francolí y el puente del ferrocarril cercano a la factoría porque "en alguna otra ocasión ya han estado aquí, como durante los Juegos de 1992".

El polígono químico de Tarragona sufrió dos atentados graves, uno perpetrado por ETA, el 12 de junio de 1987, y otro por los Grapo, el 9 de septiembre de 1990.