Rabei Osmán Sayed, Mohamed el Egipcio --el cerebro del 11-M de Madrid--, estaba recabando información de la ciudad de París y, en concreto, de sus líneas de metro, según consta en el auto de prisión dictado ayer por dos fiscales italianos.

El terrorista pidió esa información el pasado 26 de mayo al jefe del grupo detenido en Bélgica, Ray Mohamed, Murad . Sayed fue detenido el lunes en Italia, y el martes, en una redada en tres ciudades belgas, se arrestó a 15 supuestos islamistas vinculados también a Al Qaeda.

Los fiscales italianos Maurizio Romanelli y Armando Spataro explican que El Egipcio llamó a Murad para ordenarle que reuniera información sobre París y los sistemas de control e inspecciones del metro. El detenido en Bélgica le contestó: "Todo está a punto", antes de mencionar a una tercera persona, a la que identificó como Mohamed y de la que dijo: "Está preparado para el martirio en el lugar indicado".

LOS EXPLOSIVOS Sayed le dio entonces instrucciones para que se reuniera con Mohamed en París y para que le facilitara "todo lo necesario, como mapas, nombres y teléfonos". También le comunicó que estaban listos "145 euros" (la policía italiana considera que se refería a explosivos).

Los fiscales italianos también escriben en su resolución que El Egipcio iba a hacer pruebas para activar teléfonos móviles de forma simultánea. Ese sistema fue empleado en los atentados del 11-M. En otra conversación intervenida, Sayed informa al mencionado Murad de que en internet existe un programa que permite activar de forma centralizada diversos móviles al mismo tiempo mediante mensajes SMS.

DETENIDOS La policía belga liberó ayer a siete de los 15 detenidos en ese país, aunque cuatro de ellos han quedado a disposición de la justicia para ser expulsados.

Fuentes de la investigación explicaron ayer que Sayed y Murad coincidieron en nuestro país en el 2001 y que se marcharon en las mismas fechas, en febrero del 2003.

El juez Juan del Olmo explica, en la orden de detención contra El Egipcio , que éste "logró hacerse con el liderazgo" del comando del 11-M. El magistrado aclara que Italia le comunicó el 26 de mayo que había localizado al terrorista. En una conversación telefónica interceptada, admite que la matanza de Madrid era su "proyecto". Tres de los detenidos por el 11-M le habían delatado.