El ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel García-Margallo, ha reconocido hoy el derecho de defensa de Israel, aunque le ha pedido que lo ejerza con "proporcionalidad" y con respeto al derecho internacional, al tiempo que ha reclamado a israelíes y palestinos el "cese inmediato" de la violencia en Gaza.

Margallo se ha reunido hoy en Madrid con el presidente de la Asamblea General de la ONU, John W. Ashe, con el que ha analizado la situación en Palestina y Ucrania, así como la candidatura de España para ocupar un puesto en el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas en el periodo 2015-2016.

Tras la entrevista, Margallo ha insistido en pedir "contención" a Israel y "respeto" a los civiles y a los periodistas, y ha llamado a ambos bandos a que inicien una negociación de paz que garantice "el derecho de Israel a existir y el de Palestina a ser un estado viable".

Para apoyar esas negociaciones, Margallo ha anunciado que tras la cumbre de ministros de Exteriores que se celebra mañana en Bruselas, tiene previsto viajar primero a Túnez y después a Egipto para reunirse con las autoridades implicadas en el conflicto. Ha insistido en la necesidad de alcanzar una "paz estable" en Oriente Medio porque, ha apuntado, los bombardeos no son "un incidente aislado", sino que se vienen repitiendo desde que se creó el Estado de Israel en 1948.

Margallo ha recordado que ya se han hecho las primeras gestiones para garantizar la seguridad de los españoles residentes de la franja de Gaza, de la que ya han salido 51 ciudadanos españoles -acompañados de 14 familiares, ya que muchos eran menores- que se encuentran ahora en Jordania.

Así, ha explicado que ahora mismo, en Gaza hay 27 españoles de los que el Ministerio está "muy pendiente": ocho periodistas, dos miembros de Naciones Unidas, dos activistas de ONGs y 15 residentes permanentes. Exteriores ya ha modificado las recomendaciones para quienes vayan a viajar a Gaza y ha pedido a los españoles que abandonen la zona. Durante el encuentro, Margallo y Ashe también han repasado la situación en Ucrania tras el derribo del avión de Malasyan Airlines.

El ministro se ha mostrado partidario de esperar al resultado de la investigación "imparcial y completa" sobre el siniestro antes de que la UE decida aplicar nuevas sanciones a Rusia. "La postura de España es pedir una investigación de la Asociación Internacional de Aviación Civil. Hasta entonces es prematuro hacer conclusiones", ha asegurado Margallo, que ha pedido al Gobierno ruso que cese en su apoyo a los separatistas rusos que controlan parte del territorio del este de Ucrania.

El ministro ha reiterado su deseo de que se respete la legalidad internacional y por eso condena la anexión de Crimea y cualquier intento de desestabilización de Ucrania, que "tiene derecho a decidir su destino sin injerencias externas". Entretanto, Margallo continuará con su ronda de contactos para que España acceda a un puesto en el Consejo de Seguridad de la ONU bajo el estatus de miembro no permanente.

Esta semana se reunirá en Bruselas con los países asiáticos que tienen voto en la elección de los miembros del Consejo de Seguridad y después viajará a Benin a la reunión de la unión de países de África, el Caribe y el Pacífico (ACP).

Después del verano, el ministro de Exteriores participará en Bali en la reunión anual de la Alianza de Civilizaciones y viajará a Samoa al encuentro de los llamados "pequeños estados isleños" muchos de los cuales tienen derecho a voto en la composición del Consejo de Seguridad. Margallo ha subrayado que España ha hecho una "campaña de enorme intensidad" a todos los niveles para conseguir un puesto en el Consejo: "No hemos podido trabajar más de lo que lo hemos hecho".

Por su parte, Ashe ha destacado que la ONU ha establecido que, a partir de 2015, los países elegidos tendrán un periodo de seis meses para prepararse antes de formar parte de ese órgano. Ha explicado que los países elegidos en octubre pasado tuvieron que enfrentarse "deprisa y corriendo" a una serie de situaciones que no esperaban y frente a las que no estaban debidamente preparados.

En ese sentido, Ashe ha rechazado que la ONU no sea efectiva en la resolución de conflictos a distintos niveles, como Siria, y ha asegurado que si esta organización no existiera "habría que inventarla".