La ministra de Asuntos Exteriores, Ana Palacio, dio ayer por "zanjado" el incidente diplomático entre España y Marruecos registrado el jueves pasado tras desviarse de su ruta de aproximación dos "aviones de enseñanza" del Ejército del Aire español, que sobrevolaron la ciudad de Nador, muy próxima a Melilla.

La víspera, Rabat había denunciado que los aparatos que invadieron su espacio aéreo eran dos cazas españoles. El Gobierno español lamentó ayer el incidente y precisó que "ambos aviones eran dos C-101 del grupo de escuelas Matacán, que se dirigían a Melilla para el desarrollo de unos ejercicios". El citado grupo de escuelas pertenece al Ejército del Aire y está ubicado en la base aérea de Salamanca.

En una nota oficial, la Oficina de Información Diplomática agregó que los aparatos "no llevaban ningún tipo de armamento, ni cámaras, ni otros sistemas de observación", y subrayó que "debido a las adversas condiciones meteorológicas se produjo una desviación de la ruta de aproximación de los aviones". "La visibilidad en la zona era muy escasa (5 kilómetros) y el techo de nubes muy bajo (500 metros)".

La ministra Palacio aseguró ayer mismo que el Gobierno ha respondido al compromiso adquirido de dar esa información, que ha sido recibida ya en Rabat, por lo que, aseguró, "la cuestión está zanjada".

Las relaciones entre España y Marruecos fueron muy críticas desde 1999 hasta el año pasado. El momento más álgido de la tensión se produjo el verano del 2002, cuando gendarmes marroquís ocuparon el islote de Perejil. La cumbre hispano-marroquí de Marrakech del pasado mes de diciembre rubricó el deshielo de las relaciones.