Madrid. -- España ha gastado 369.733.478 euros durante las operaciones en Irak, incluido el repliegue de las tropas, de los que 262 millones han sido para gastos estrictamente militares, 83 para la Conferencia de Donantes y 24 para la organización de este foro, que se celebró en Madrid, y otras ayudas.Así lo ha anunciado el ministro de Defensa, José Bono, en la comisión correspondiente del Congreso de los Diputados, en la que ha explicado que este dato incluye el ejercicio del 2003 y el primer semestre, con repliegue de tropas incluido, de 2004.Sobre los beneficios obtenidos por la participación, ha subrayado que dos empresas españolas, Cepsa y Repsol, tienen la posibilidad de comprar 15 millones de barriles de petróleo, mientras que Soluziona, la filial de servicios profesionales de Unión Fenosa, junto a una empresa norteamericana, ha hecho un contrato marco de hasta 1.500 millones de dólares.No hay agentes del CNI en IrakBono ha anunciado que también el Centro Nacional de Inteligencia (CNI) ha sacado a todos sus agentes de Irak, por lo que no queda ningún militar español en aquel territorio, y ha pedido que la vuelta de las fuerzas constituya "el presagio de un gran acuerdo en materia de Defensa".Bono ha hecho este anuncio, después de haberlo consultado esta mañana con el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, en respuesta al diputado de CiU Josep Maldonado, durante su primera comparecencia ante la Comisión de Defensa del Congreso.El ministro ha pedido que la "alegría" por la vuelta de los soldados españoles de Irak y el "silencio" que va a guardar sobre la decisión del anterior Gobierno de enviarlos sirva como preludio del consenso entre todos los grupos políticos del Congreso, a los que consultará todas sus decisiones sobre los servicios militares españoles en el extranjero.De este modo, ha insistido en que España "no ha decidido aún" si enviará a Afganistán las tropas que ha retirado de Irak, con lo que desmintió las informaciones aparecidas hoy en un medio de comunicación, aunque se ha mostrado "más bien contrario" a la posibilidad de reforzar los 400 soldados que ya prestan servicio en Kabul.