España y el Reino Unido son países"aliados, socios y amigos", que superarán las "diferencias" en asuntos como "el caso de Gibraltar", afirmóFelipe VI en su discurso en el Palacio de Westminster. "En esa historia tan rica y fructífera también ha habido distanciamientos, rivalidades y enfrentamientos", reconoció el Rey, "pero gracias al trabajo y la determinación de nuestros gobiernos, autoridades y ciudadanos, han quedado atrás como hechos del pasado". "Estoy seguro", añadió, "de que esa determinación para superar diferencias se redoblará en el caso de Gibraltar, y confío plenamente en que el diálogo necesario y el esfuerzo de nuestros gobiernos conseguirán avanzar en la búsqueda de fórmulas satisfactorias para todos".

AFP / CHRIS J RATCLIFFE | El Rey Felipe VI y la Reina Isabel II en un carruaje durante la ceremonia de bienvenida por el centro de Londres

La alocución del Rey, ante miembros del Gobierno británico y de las dos cámaras, de Lores y Comunes, formaba parte de la visita de Estado de tres días, que desde el miércoles están realizando al Reino Unido Felipe VI y la reina Letizia.

AP / MATT DUNHAM | La Reina Isabel II y la Reina Letizia observan como sus respectivos maridos pasan revista a la Guardia de Honor

En un perfecto inglés, el Monarca dijo respetar "plenamente" la decisión de los británicos de abandonar la Unión Europea (UE). "Aunque nos pueda pesar", añadió. Pero pidió que se negocien y acuerden garantías suficientes para británicos y españoles que residen en los respectivos países una vez consumado el'brexit'. "Son ciudadanos que aspiran legítimamente a una vida digna y segura, para ellos y para sus familias", señaló. "Por ello, animo a nuestros dos gobiernos a seguir trabajando para que el acuerdo de salida del Reino Unido de la Unión Europea les dé la necesaria confianza y certidumbre".

IGNACIO ECHEVERRÍA

Felipe VI inició su discurso rindiendo homenaje a las víctimas de recientes atentados ocurridos en el Reino Unido. Citó a la diputada Jo Cox, "salvajemente asesinada hace un año" y al "policía Keith Palmer, que murió defendiendo este Parlamento. Y añadió: "Permítanme rendir tributo al español Ignacio Echeverría que, como otros muchos, británicos o no, demostró un comportamiento ejemplar y heroico en estos atentados".

El poder dirigirse al Parlamento británico es un privilegio que se otorga de manera excepcional a destacados visitantes, como ocurrió en el pasado con el entonces presidente de EEUU Barack Obama, la cancillera alemana, Angela Merkel, o el presidente de China, Xi Jinping. Hace 31 años, el honor fue para el rey Juan Carlos, a quien su hijo ha mencionado ahora en dos ocasiones. Una vez acabado el acto, Felipe VI conversó unos momentos en otro salón, con el líder de la oposición, el laborista Jeremy Corbyn.

EN CARROZA POR THE MALL

La visita de Estado había comenzado minutos después del mediodía con la recepción oficial por parte de la reina Isabel II y su marido, el duque de Edimburgo. El acto ceremonial, marcado por el protocolo de la grandes ocasiones, tuvo lugar en el Horse Guards Parade y en él estuvieron presentes varios miembros del Gobierno, incluida la primera ministra, Teresa May. Bajo un cielo inseguro de nubes y claros, con temperaturas más primaverales que veraniegas, sonaron los himnos de ambos países y tronaron los cañones en Green Park y la Torre de Londres con salvas de bienvenida. Felipe VI y la soberana, de 91 años, pasaron revista a las tropas de la guardia de honor, antes de recorrer la gran avenida de The Mall en una carroza real, camino del Palacio de Buckinghamdonde se alojan durante su estancia los Reyes de España.

Letizia, que eligió para la ocasión un conjunto de abrigo de verano amarillo pálido y un vestido de seda color limón de Felipe Varela, con sombrero a juego, viajó junto al duque de Edimburgo en un Landau, que había sido construido para la coronación del rey Eduardo VIIen 1902. Isabel II y su esposo organizaron un almuerzo privado en Palacio. Una vez concluido, visitaron una exposición de objetos españoles de la colección real.

CITA CON EMPRESARIOS

Felipe VI y su esposa habían pasado la noche del martes en un hotel de Londres, donde fueron recogidos por el Príncipe de Gales y su esposa Camila, duquesa de Cornualles, con quienes a media tarde tomaron el té en Clarence House. La primera jornada finalizó con un gran banquete de gala en el salón de baile del Palacio de Buckingham. Este jueves, los Reyes tienen previsto reunirse con empresarios y miembros de la comunidad española en Londres. Felipe VI almorzará en Downing Street con la primera ministra, momento en el que sin duda se volverá a hablar del 'brexit' y quizá de Gibraltar.