Madrid.-- El Gobierno ha aprobado hoy la reforma de Ley Orgánica del Poder Judicial (LOPJ), que establece que los nombramientos de la cúpula judicial deben hacerse por una mayoría de tres quintas partes del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ).Según ha indicado el Ejecutivo, con esta reforma se pretende reforzar la legitimación democrática y el pluralismo en los nombramientos de los magistrados del Tribunal Supremo y de los presidentes de los tribunales superiores de justicia.La iniciativa --remitida al Congreso de los Diputados-- pretende dar respuesta a la preocupación expuesta por una amplia mayoría de los diputados en una proposición no de ley, en la que se instaba al Gobierno a la adopción de las medidas precisas que refuercen la independencia del poder judicial.Entre los objetivos de esta norma figura la potenciación del Tribunal Supremo como órgano jurisdiccional superior en todos los órdenes y que las presidencias de los tribunales superiores sean los órganos judiciales en los que culmine la organización judicial de la comunidad autónoma.Informe del CGPJEl CGPJ remitió al Gobierno un informe en el que advierte que esta reforma podría vulnerar la Constitución y "convertirse en una intempestiva intromisión" de las competencias del órgano de gobierno de los jueces.En los próximos meses están previstos varios nombramientos --entre ellos varios por jubilaciones-- y así, de ahora a finales de enero de 2005, en el Tribunal Supremo se tendrán que renovar las presidencias de cuatro de las cinco salas que configuran este órgano.