El Gobierno aprobó ayer un decreto ley para renovar de forma urgente y temporal el consejo de administración y al presidente de RTVE, ante el vacío de poder que se produce tras la salida de José Antonio Sánchez y hasta que se elija por concurso público a su sustituto. La portavoz del Gobierno, Isabel Celaá, explicó en la rueda de prensa que el Congreso y el Senado tendrán que elegir en quince días a los diez miembros del consejo de administración de la corporación pública, de entre los cuales se designará en un mes a su futuro presidente.

«Podemos concluir que en un mes tendremos nombrado al presidente de RTVE. España merece tener unos medios públicos de comunicación que no estén al servicio de ninguna ideología, por muy legítima que esta sea», dijo Celaá.

La portavoz aseguró que esta medida viene a actuar «ante un vacío de poder» y a «resolver un problema de urgencia», y precisó que se trata de «una regulación transitoria» que cesará cuando las Cortes apliquen la nueva ley de elección de cargos de RTVE, que establece que sean seleccionados mediante concurso público.

El decreto, que «cuenta con los apoyos» parlamentarios necesarios para ser convalidado, «es enteramente respetuoso con la ley en todos sus términos», insistió Celaá, quien subrayó que el concurso público «sigue su marcha». «Tendremos una RTVE que cumpla fielmente con los principios fundacionales» de la corporación: pluralidad, independencia, imparcialidad, veracidad y objetividad.

José Antonio Sánchez, que ayer abandonó oficialmente su puesto, ha sido el cuarto presidente de RTVE desde que dejó de ser ente público y se convirtió en corporación el 1 de enero de 2007, y después de que hayan ocupado ese puesto Luis Fernández, Alberto Oliart y Leopoldo González-Echenique, quienes dimitieron antes de concluir su mandato.