El ritmo de trabajo que se había fijado la comisión del 11-M sufrió ayer su primer frenazo. El Consejo de Ministros no estudió la desclasificación de la docena de documentos secretos que le solicitaron los comisionados el pasado martes, con lo que la comisión investigadora no podrá dedicar la próxima semana a estudiarlos y no podrá establecer el listado de comparecientes en su reunión del jueves, tal como había previsto.

El canario Paulino Rivero, presidente de la comisión que investiga la masacre terrorista de Madrid, explicó el miércoles pasado, al término de la primera reunión, el calendario de trabajo que habían acordado los diputados. Según los planes de los parlamentarios, la documentación solicitada al Gobierno debería llegar al Congreso antes del próximo martes, para permitir su estudio detallado antes de la reunión fijada para el jueves.

LOS COMPARECIENTES Los parlamentarios habían acordado no establecer el listado de peticiones de comparecencias hasta tener en su poder los informes pedidos al Gobierno, para tener claro quién debe declarar en el Congreso y qué le quiere preguntar cada grupo a cada uno de los testigos. La comisión del 11-M había fijado los días 6, 7 y 8 de julio como las fechas para celebrar las primeras comparecencias.

La vicepresidenta del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, reconoció ayer en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros que el Gobierno no se había detenido a estudiar las desclasificaciones solicitadas por la comisión del 11-M. De la Vega aseguró que el Parlamento ha pedido al Ejecutivo casi un millar de informes y justificó no haber empezado a analizarlos por la carga de temas que tenía la agenda del Consejo de Ministros celebrado ayer.

EN MANOS DE LOS MINISTERIOS El Gobierno se limitó a remitir las peticiones a los ministerios que poseen la documentación solicitada, explicó la número dos del Gabinete de José Luis Rodríguez Zapatero. Estos ministerios son los de Interior, Asuntos Exteriores, Justicia y Defensa, según fuentes del Ejecutivo. Durante la próxima semana, esos ministerios remitirán al Congreso "todos los informes que obren en su poder y no sean clasificados", avanzaron las mismas fuentes, de manera que la comisión pueda empezar a trabajar.

HASTA EL 2 DE JULIO Pero la docena de documentos del Centro Nacional de Inteligencia (CNI) clasificados secretos que solicita la comisión no podrá llegar a manos de los diputados al menos hasta que los estudie "uno a uno" el Consejo de Ministros del 2 de julio, dijo De la Vega.

A pesar de este retraso, la vicepresidenta reiteró que existe "disposición" por parte del Gobierno de facilitar cuanta documentación le reclame la comisión de investigación "con el único límite de la seguridad de los ciudadanos".