El Gobierno asume la decisión del Tribunal Supremo de suspender por el momento la exhumación de Francisco Franco, pero está convencido de que al final desestimará el recurso de la familia y acabará permitiendo el traslado de los restos del dictador.

Desde Moncloa se subraya que esta suspensión cautelar implica que el Gobierno pospondrá la ejecución de la exhumación "hasta que en los próximos meses se dicte sentencia sobre el fondo del asunto". El Ejecutivo reconoce que "no es extraño" que el Tribunal Supremo suspenda la ejecución de una decisión cuya legalidad tiene que revisar a instancia de una de las partes. Pero recalca que "obviamente, la suspensión cautelar no indica nada sobre el fondo del asunto". Y las fuentes añaden que, de hecho, el Gobierno está convencido de que el Tribunal Supremo desestimará este recurso, como ha venido haciendo hasta ahora con todos los recursos planteados por la familia Franco.

Mucho más duro, Alberto Garzón (IU) ha criticado "el papel lamentable de la 'justicia democrática' de España":

A las puertas del Supremo, colectivos de memoria histórica contra la decisión. Una treintena de personas, convocadas por la campaña '#NiValleNiAlmudena', han pedido la exhumación inmediata y han acusado al alto tribunal de permitir la "impunidad" de los crímenes franquistas. Con banderas republicanas y pancartas con fotografías de víctimas de la dictadura, los manifestantes han gritado consignas coma "Tribunal Supremo, suprema impunidad" o "Franco asesino"

Los franquistas: "Batalla ganada"

El presidente de la Fundación Franco, Juan Chicharro, ha valorado la decisión como"una batalla ganada dentro de una guerra que va a ser larga". "Lo que nos interesa es el fondo, que se dilucidará sabe Dios cuando", ha valorado, sacando pecho tras el "varapalo judicial" al Ejecutivo.

"Las mejores condiciones no han sido las que nosotros esperábamos de las últimas elecciones, pero el tiempo es largo y sabe Dios lo que pasará", ha añadido, antes de subrayar que, a pesar del anuncio de hace un año de Pedro Sánchez, "el caudillo sigue donde está y el retraso es de un año y pico".