El portavoz del Gobierno vasco, Josu Erkoreka, no ha descartado este martes la posibilidad de mantener contactos de ETA de cara a facilitar la entrega de las armas. Aunque ha matizado que todavía están esperando una "expresión inequívoca" de la voluntad de ETA para desarmarse, ha advertido que no están dispuestos a "dejar perder ninguna posibilidad" para consolidar el proceso de paz.

Erkoreka ha intentado reducir la tensión abierta con la presidenta del PP, Arantza Quiroga, quien ha acusado al lendakari Iñigo Urkullu de solicitar al presidente Mariano Rajoy beneficios penitenciarios para los presos de ETA. Sin embargo, el portavoz del Ejecutivo sí ha querido puntualizar que Quiroga ha sido la "unica interlocutora" de Urkullu que ha dado a conocer públicamente “contenidos materiales” de las reuniones mantenidas en materia de paz y convivencia. “Los demás han respetado los principios de lealtad y discreción que nos habíamos prometido”, ha destacado Erkoreka.

Precisamente en respuesta a Quiroga, que el pasado lunes afirmó que dialogar con ETA es algo "antidemocrático", Erkoreka ha señalado este martes que si "un contacto con ETA no es democrático" se estaría poniendo en tela de juicio la "condición democrática" de los expresidentes Suárez, Calvo-Sotelo, González, Zapatero o Aznar. "No sé si Quiroga quería llegar tan lejos, pero de sus palabras se deriva esa conclusión", ha apuntado.

También se ha defendido de quienes desde el PP acusan al Gobierno vasco de reclamar medidas de gracia para los etarras encarcelados, y ha explicado que en su reunión con Rajoy, el lendakari Urkullu planteó "un plan completo de paz y convivencia", que incluía el desarme de ETA, el reconocimiento del daño, la reparación de víctimas, la flexibilización de la política penitenciaria y la necesidad de consensos entre las cuatro grandes fuerzas vascas (PNV, EH Bildu, PSE y PP).