Alfonso Guerra, presidente de la comisión constitucional, se vanaglorió ayer de los recortes practicados por el Congreso en el Estatuto, un texto del que dijo que, como el plan Ibarretxe, era "infumable". "Al plan Ibarretxe lo cepillamos antes de entrar en la comisión y al otro el proyecto estatutario catalán lo cepillamos como carpinteros dentro de la comisión", proclamó Guerra durante su larga intervención --un hora y media-- en el congreso de las juventudes socialistas, celebrado en Barakaldo.

LA CULPA, DE AZNAR El exdirigente socialista responsabilizó al PP de que Euskadi y Cataluña presentaran unos proyectos "infumables". A su juicio, la estrategia de José María Aznar en la segunda etapa de su Gobierno de "criminalizarlo todo" suscitó que los nacionalismos se "calentasen" y sacaran adelante textos inaceptables. Pero dicho esto, aseveró que lo que no se podía hacer era dejar pasar unos proyectos que superaban la Constitución. De ahí que, explicó, el Congreso tuviera que intervenir para rechazar de pleno el plan Ibarretxe, que no fue admitido a trámite, y "cepillar" el Estatuto en la comisión constitucional.

El que fuera vicepresidente del Gobierno con Felipe González recomendó que se analice el texto final del Estatuto publicado en la página web del Congreso, en el que, a petición suya, se han escrito en negrita las novedades introducidas en la comisión que él presidía. "Te pones a mirar así y ves negrita, negrita, negrita...", se mofó.