Dos cartas escritas en árabe encontradas en el coche de un imputado por el 11-M fueron traducidas ayer para comprobar si aportan alguna información sobre los atentados de Madrid. Las misivas estaban en un vehículo que la policía encontró el 22 de mayo en Madrid, en el marco de la operación de seguridad con motivo de la boda del príncipe Felipe. El coche pertenece a Abdeluaid Berrak, marroquí en libertad provisional tras ser detenido por su presunta implicación en la masacre del 11-M.

Las dos cartas generaron polémica, puesto que la policía abrió una investigación para determinar si el anterior comisario general de la policía científica, Carlos Corrales, ocultó la existencia de las misivas a su sucesor, Miguel Angel Santano.

Corrales afirmó que se enteró ayer mismo, y por los medios de comunicación, de la existencia de las dos cartas y aseguró que si se abre una investigación quedará claro que no ha ocultado la existencia de ninguna información.