Los intentos fracasados entre Pedro Sánchez y Quim Torra para entablar una conversación han molestado al secretario general de Podemos que, esta mañana, ha tachado de "tomadura de pelo" que ambos presidentes "no quieran hablar". Pablo Iglesias ha criticado duramente que el jefe del Ejecutivo en funciones no respondiera a la llamada del 'president' de la Generalitat alegando que no había condenado la violencia: "Nadie entiende que no hablen, esto no va de que se caigan bien o de que les apetezca hablar sino que tienen una responsabilidad institucional".

En una entrevista en la Cadena Ser, el candidato de Unidas Podemos ha sostenido que Sánchez "tiene que ganarse el suelo" y hablar con Torra. Contra este último ha dirigido los reproches más duros. "Lo está haciendo peor imposible", ha afirmado Iglesias sobre el 'president' catalán para añadir que "nadie puede estar satisfecho" con las actuaciones de Torra. Unos reproches que se suman a los de la pasada semana cuando dijo que "muchos independentistas no le tragan".

Preguntado por las cargas policiales, el líder morado ha querido trasladar el foco a los "responsables políticos" que son los que ordenan a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado. Según ha apuntado, tanto Mossos d'Esquadra como Policía Nacional "actúan cumpliendo órdenes de los políticos". No obstante, ha considerado que existe cierta "preocupación por los informes de Amnistía Internacional" en los que se señalan "casos de uso excesivo de fuerza" por parte de la policía en Cataluña.

LA SOLUCIÓN

Una vez analizada la situación actual catalana, la vista está fijada en los siguientes pasos para solucionar el conflicto. Para Iglesias, la respuesta está en un entendimiento entre todas las fuerzas políticas para encontrar una vía intermedia. "Todas las fuerzas políticas y sectores de la sociedad civil tienen que dialogar", ha sentenciado antes de subrayar la necesidad de "una mesa con todas las formaciones políticas en las que todas las propuestas se pongan encima de la mesa" para ver "si se puede llegar a un punto de acuerdo".

Además, el candidato morado se ha mostrado prudente con este "problema político que es histórico" en el que se necesita diálogo y no que algunos partidos lo utilicen como "una mina de oro para obtener buenos resultados electorales". Así mismo, ha insistido que hay que apostar por la "mesura, calma, sentido de estado, diálogo político y búsqueda de soluciones democráticas.