ERC, EH Bildu, Junts, CUP y BNG no participarán este martes en la conmemoración del golpe de estado del 23-F de 1981 al que asistirá Felipe VI porque consideran que el objetivo principal es "blanquear" la monarquía. Las formaciones independentistas y nacionalistas han acusado al rey emérito, Juan Carlos I, de estar implicado en los hechos que ocurrieron hace 40 años y han criticado que todavía haya informaciones clasificadas que impiden conocer lo que ocurrió con exactitud aquel día.

"De aquí a muy poco se sabrá el papel real de la Casa Real en el 23F", ha sentenciado el portavoz de los republicanos catalanes, Gabriel Rufián. A continuación, su homólogo en el BNG, Nestor Rego, ha señalado que el acto que tendrá lugar en la Cámara baja solo busca "el blanqueamiento de esta monarquía anacrónica y corrupta". Además, ha asegurado que hay "evidencias" sobre la implicación de Juan Carlos I "en un golpe de estado del que se apeó cuando vio que fracasaba".

En la misma línea, la diputado de la CUP, Mireia Vehí, ha denunciado que "mientras los jóvenes luchan por un futuro más digno", en referencia a las protestas de la última semana por la condena al rapero Pablo Hasél, en el Congreso "se está haciendo un homenajee al rey de España y a un mito fundacional de la democracia española basado en la mentira, la corrupción en el poder militar". A renglón seguido ha avisado de que "no habrá paz mientras se honore al rey corrupto y se reprima a los jóvenes que luchan por un futuro democrático y en dignidad".

Anomalía democrática

La líder de Cs, Inés Arrimadas, ha criticado duramente a estos partidos por no querer participar en la conmemoración de "un gran triunfo" de la democracia española. "Hoy no estarán aquí los nacionalistas y separatistas porque realmente no celebran que la democracia española solventara este reto y se consolidara, porque ellos aspiran a destruirla", ha explicado la presidenta naranja. Además, ha aprovechado para atacar al Gobierno de coalición por tener a estas formaciones como "socios permanentes y estables".

De manera rápida, Arrimadas también ha querido agradecer al rey emérito su "intervención decisiva" hace 40 años. "Nuestra democracia venció y se consolido", ha sentenciado antes de señalar que no podemos dar por descontada la democracia actual: "Hay que regarla todos los días. Tenemos el deber y obligación de cuidarla y protegerla".