La infanta Cristina fue la gran ausente durante la ceremonia de proclamación de Felipe VI, aunque no estuvo tan lejos de su hermano. Según publica 'Vanitatis', la hija menor de Juan Carlos acudió en un viaje relámpago a Madrid este miércoles para estar presente en un día tan especial para su familia.

En la información de Paloma Barrientos -autora del reciente título 'La infanta invisible' (Ediciones B)-, se explica que aunque Cristina no estuvo en el acto del Congreso de los Diputados, por motivos de decoro ya que está imputada por el 'caso Nóos', la infanta aterrizó en el aeropuerto Adolfo Suárez Madrid-Barajas el miércoles, adonde la esperaba el secretario personal, Carlos García Revenga.

Del aeropuerto a la Zarzuela, donde Cristina permaneció todo el tiempo. Al parecer vio la ceremonia por la tele, sola.

Después, cuando terminó la recepción en el Palacio Real, Sofía, Elena, las hermanas de Juan Carlos y sus primos Zurita y Gómez-Acebo volvieron a Zarzuela y pudieron acompañar a Cristina. Por poco rato, porque la infanta voló el mismo jueves hasta Ginebra, donde vive con su marido, Iñaki Urdangarin, y sus cuatro hijos.