La Comisión Europea propuso ayer someter a los jefes de Estado y de Gobierno la adopción de una "declaración de solidaridad" contra el terrorismo, durante la cumbre de la Unión Europea, prevista para los póximos días 25 y 26. Con esta declaración, la Comisión pretende denunciar la "cultura del secreto" existente entre los Estados miembros en lo que concierne a la lucha antiterrorista. El proyecto de "declaración de solidaridad" afirma que "la UE y sus estados miembros actuarán conjuntamente en un espíritu de solidaridad si uno de sus miembros es víctima de un ataque terrorista".

El Banco Central Europeo (BCE) estudiará el jueves las consecuencias que pueden tener sobre la economía los atentados de Madrid, según indicó el gobernador de la entidad, Klaus Liebscher. Los expertos temen que el ataque del 11-M afecte a la confianza de los consumidores en toda Europa.