La jueza del caso Erial decretó ayer la puesta en libertad del expresidente valenciano y exministro Eduardo Zaplana, en prisión provisional desde mayo del año pasado tras ser imputado por, entre otros, los delitos de blanqueo, cohecho, malversación y prevaricación. También quedaron libres sus dos supuestos testaferros.

Las investigaciones habrían permitido encontrar y bloquear ya 6,3 millones de euros de los más de 10 que se cree que ingresó por comisiones irregulares en este caso. Según fuentes judiciales citadas por Efe, el dinero se ha hallado en una cuenta en Suiza y ya se ha cursado una orden para que sea transferido, lo que impedirá a los investigados acceder a él. Existen indicios de que el 90% del montante, unos cinco millones y medio, serían del exdirigente del PP.

SIN FIANZA

Este logro, junto con la disminución del riesgo de destrucción de pruebas, habría motivado la decisión de acabar con la prisión provisional para los tres. Aunque no tendrán que abonar fianza, deberán depositar su pasaporte y comparecer una vez a la semana ante el juzgado de guardia. Zaplana ha estado casi nueve meses en prisión preventiva, pero desde hace un mes y medio permanece ingresado en el hospital La Fe de Valencia por un empeoramiento de la leucemia que le diagnosticaron en el 2015 y por la que recibió un trasplante de médula en el 2016.

Fuentes sanitarias consultadas por Efe informaron ayer por la tarde de que todavía no se había preparado la documentación necesaria para concederle el alta y que, además, tiene pendientes varias pruebas médicas, por lo que seguirá ingresado, aunque ahora ya sin ningún tipo de restricción en las visitas, ni de control de sus movimientos.

En las últimos meses, sus abogados habían solicitado en varias ocasiones su puesta en libertad por motivos de salud o que fuera trasladado a su domicilio con algún tipo de medida de control, algo a lo que la jueza se había negado hasta ayer amparándose en varios informes forenses que rechazaban que hubiera un riesgo vital inminente y en que también en los paraísos fiscales existen hospitales.

La encargada del Juzgado de Instrucción 8 de Valencia había explicado que mantenía la prisión provisional ante el riesgo de fuga y de destrucción de pruebas y a la espera de que llegara la información que se había solicitado a los diversos países en los que los investigadores creen que tiene oculta su fortuna. En este tiempo, políticos de distinto signo, pero especialmente el expresidente del Gobierno José María Aznar y el actual líder del PP, Pablo Casado, habían reclamado su libertad, por razones de salud.

Tras conocer su excarcelación provisional, Zaplana afirmó en un comunicado: «No tengo ni he tenido ninguna cuenta en Suiza ni en ningún otro país ni a mi nombre, ni al de terceros [...] No he cobrado un euro en sobornos o comisiones ilegales, ni me apropié ni distraje fondos o activos de la Administración».

La dirección nacional del PP celebró ayer que haya terminado el «encarcelamiento inhumano» de Zaplana. Todos los partidos con representación en las Cortes Valencianas (PSPV, Compromís, PP, Podem y Ciudadanos) coincidieron en manifestar su respeto.