Daniel Lacalle, gurú económico de Pablo Casado, rebatió ayer al secretario de Organización del PSOE y ministro de Fomento, José Luis Abalos, asegurando que le «tergiversó» y «manipuló» sus palabras sobre las pensiones.

«Está mintiendo de manera consciente para meter miedo a los votantes sobre algo que no he dicho, sino todo lo contrario», lamentó en La Sexta, después de que Ábalos dijera que el PP «quiere aniquilar el sistema público recortando pensiones».

El número 'cuatro' de las listas del PP al Congreso por Madrid explicó que sus declaraciones «tergiversadas» ya han sido corregidas por el periódico que las publicó y confirmado por la periodista que lo redactó. En este sentido criticó que el PSOE esté usando esto como arma electoral. «Están utilizando la peor de las tácticas políticas con una cuestión de Estado como son las pensiones», afeó el economista para reiterar que lo que está haciendo Ábalos es «mentir a sabiendas». «Lo que pone en peligro las pensiones es el despilfarro de los viernes sociales», afirmó en otra entrevista en Onda Madrid, en referencia a las medidas que aprueba cada Consejo de Ministros.

Como fórmula para guiar la subida de las prestaciones, Lacalle abogó por recuperar el Índice de Revalorización de las Pensiones (IRP) que ha motivado las movilizaciones de los pensionistas en el último año. El IRP determina una subida mínima de las pensiones del 0,25%, aplicable mientras el sistema no esté en equilibrio financiero, y un máximo de hasta el IPC más el 0,5% en momentos de bonanzas. Esta fórmula, que se empezó a aplicar en el 2014, fue suspendida por el Gobierno de Rajoy para el 2018 y el 2019 ante la presión de los pensionistas en las calles.

«El IPC en sí mismo no vale», sentenció Lacalle, con el argumento de que si el IPC es negativo tendrían que bajar las pensiones, «que es lo que en realidad quieren hacer PSOE y Podemos, recortarlas». Frente a esto, Lacalle apostó «por lo que ya está publicado en el BOE» que incluye «un mínimo de revalorización» (se refiere al 0,25%) y «el poder adquisitivo con un máximo adicional», añadió en una torpe referencia al tope del IPC más 0,5 puntos que establecía el IRP.