La Asociación Nacional del Arma de España (ANARMA), el lobby armamentístico patrio, ha recibido con agrado la defensa del líder de Vox, Santiago Abascal, del derecho a tener armas en casa y su uso en defensa propia.

Este grupo, una suerte de Asociación Nacional del Rifle (NRA) estadounidense a pequeña escala, se jacta de sus contactos con el partido ultraderechista y ha adoptado una posición muy activa para influir en la legislación de armas comunitaria y nacional.

En concreto, este lobby trató de impedir que la Comisión Europea restringiera el uso de armas y, tras la directiva de abril de 2017, ha redoblado sus esfuerzos para presionar a los partidos de cara a la transposición nacional.

Por ello, ANARMA ha intensificado su actividad y presume de contactos con Vox. Tras las palabras de Abascal en armas.es, esta organización no ha dudado en sacar pecho en redes sociales, tachando la novedad de "BOMBA MEDIÁTICA".

DOCTRINA DEL CASTILLO

En su opinión, la situación de las armas en España cambia "radicalemente" con las palabras de Abascal, ya que "apoya y defiende la 'Doctrina del Castillo'". Heredada del Reino Unido, esta idea explota la cultura del miedo y apuesta por la ley de la defensa propia, consagrando el derecho al uso de armas para defenderse. En 2005, el gobernador de Florida, Jeff Bush, la volvió a popularizar con la 'Stand your ground act', al hacer legal para los residentes de este territorio de EEUU "responder con fuerza a la fuerza, incluida la fuerza letal," ante las amenazas.

La asociación pro-armas "lleva meses reuniéndose con diferentes partidos políticos (...) y empujando por cambios en las políticas de armas de nuestro país", admite, antes de jactarse de que Abascal "habla sin complejos del derecho a la autodefensa" y de tachar esta declaración de "antes y después".

En el muro de Facebook de esta organización aparecen cargos de ANARMA fotografiados con políticos de Vox (también han sido recibidos por Ciudadanos) como Javier Ortega Smith e Iván Espinosa de los Monteros.

INTERIOR LIMITA

Pese a estos esfuerzos, el Gobierno limitará la reforma del reglamento de armas de fuego a lo que le exige la normativa europea, que reforzó el control en la adquisición y tenencia. Así, el Ejecutivo no va a incorporar otros cambios, lo que ha generado malestar entre las organizaciones armanetísticas, de caza y dederaciones afectadas.

Pese a los intentos de ANARMA, aún queda a años luz de la Asociación Nacional del Rifle, una grupo tan potente en EEUU que llegó a donar 30 millones de dólares a la campaña del actual presidente, Donald Trump. Aunque ahora se han distanciado, el propio mandatario llegó a prometerles que tendrían "un amigo en la Casa Blanca".