La antigua pareja del ciudadano español Domingo Expósito Moreno, asesinado el miércoles en el sur de Argentina, dijo hoy a Efe que jamás amenazó al padre de su hija y que, por el contrario, era él quien la amenazaba y afirmó que la niña le tenía miedo a su padre y a su nueva pareja.

Nadia Kesen, madre de la niña de 6 años cuya custodia reclamaba Expósito, iba a viajar junto a su hija y el padre de la niña la semana próxima a España, para tramitar allí una causa en la que se debía decidir la custodia definitiva de la menor.

"Yo en ningún momento amenacé a nadie. Simplemente estábamos preparándonos para viajar. Él nunca fue una persona muy pacífica, él tenía problemas conmigo. No me ayudaba con la nena. Lo único que quería era llevarse a la nena", dijo Kesen en declaraciones a Efe.

Expósito resultó muerto a tiros la noche del pasado miércoles en la ciudad de Comodoro Rivadavia, 1.500 kilómetros al sur de Buenos Aires, donde residía hace dos años.

Un encapuchado disparó a quemarropa a Expósito cuando llegaba a su casa junto a su actual pareja, Carolina Gayá, y el hijo de ésta, de 4 años.

Gayá dijo a la Justicia que ambos habían recibido amenazas y que había visto varias veces el mismo automóvil en el que escapó el asesino cerca del domicilio de la madre de la niña.

"Nosotros no teníamos fijado un horario de visita para la nena, pero él la iba a ver cuando quería y se la llevaba. En el último tiempo no la veía y yo tenía amenazas de él", aseguró hoy Kesen, que se separó de Expósio en 2010, tras lo cual regresó a Argentina con su hija, nacida en España, sin el consentimiento del padre.

Según la mujer, su hija tenía miedo porque vio que el padre había ido a agredir a su madre y además "tenía problemas con la pareja de él".

"La nena me decía que ella la tocaba y no quería que la tocara. No quería ir (con su padre) porque tenía miedo. A medida que iba pasando el tiempo, decía que ella le pegaba. Evidentemente, yo no quería que se quede con ella ni con él porque no sabia qué iba a pasar", relató.

La niña, según su madre, tuvo asistencia psicológica: "Yo no sé qué va a pasar. Nadie vino a hablar conmigo", dijo la mujer, que confirmó que la Policía no se puso en contacto con ella tras la violenta muerte de Expósito.