Destinados a más de 6.000 kilómetros, 1.680 militares españoles se han integrado en los ocho contingentes desplegados en Afganistán desde el pasado 25 de enero del 2002 hasta el día de hoy. La misión de Asistencia para la Seguridad (ISAF) fue impulsada por la ONU después de que los diferentes grupos afganos acordaran en la conferencia de Bonn, celebrada el 5 de diciembre del 2001, pedir ayuda a la comunidad internacional para proteger al Gobierno provisional encargado de impulsar la paz y las nuevas instituciones del país.

El accidente del Yak-42, el 26 de mayo del 2003, en el que murieron 62 militares españoles al volver de Afganistán, supuso el mayor tributo en vidas de las misiones humanitarias llevadas a cabo en el exterior.