La Mesa de la Diputación Permanente del Congreso ha rechazado este lunes por unanimidad el recurso presentado por Vox contra la decisión de la presidenta de la Cámara, Meritxell Batet, de expulsar de la última Diputación Permanente a su secretaria general, Macarena Olona, después de llamarla al orden por tres veces consecutivas.

El pasado 22 de octubre, Olona fue expulsada de la Diputación Permanente --el único órgano activo entre legislaturas-- al inicio de la sesión tras un 'rifirrafe' con Batet que comenzó por los asientos a ocupar por los diputados de Vox y prosiguió con otro 'encontronazo' por su petición para introducir un debate sobre la situación de Cataluña.

Vox recurrió la decisión de Batet en un escrito en la que pedían que se anulara y se dejara sin efecto la expulsión alegando que esta sanción se produjo tan solo 50 segundos después de que la diputada hubiera pedido por primera vez la palabra y, además, sin haber advertido a Olona de las consecuencias de una tercera llamada al orden, contraviniendo lo que marca el Reglamento.

Sin embargo, en su reunión de este lunes, la Mesa de la Diputación Permanente ha rechazado por unanimidad y sin debate alguno el recurso de los de Santiago Abascal, según confirmaron a Europa Press fuentes parlamentarias.

RECURSO ANTE EL CONSTITUCIONAL

En caso de estar disconforme con el órgano de gobierno de la Cámara, a Vox sólo le queda ya acudir al Tribunal Constitucional para que se pronuncie sobre la postura adoptada por Batet que, a juicio del partido tachado de extrema derecha, distan de la "mesura y prudencia" con la que anteriores presidentes de la Cámara Baja han ejercido su potestad para expulsar a un parlamentario.

Esta medida sólo se ha adoptado dos veces en ocasiones anteriores: en el año 2006, cuando el socialista Manuel Marín expulsó del Pleno al diputado del PP Vicente Martínez Pujalte, y en el 2018, cuando el 'popular' Jesús Posada hizo lo propio con el parlamentario de ERC Gabriel Rufián.