La portavoz de Unidas Podemos en el Congreso, Irene Montero, defendió ayer que, pese a los malos resultados de las elecciones del domingo, su coalición es aún determinante en algunos municipios y autonomías y sobre todo en el gobierno de España, por lo que ha pedido al PSOE que no mire a Ciudadanos.

Montero invitó, en una entrevista en la Ser, a «reflexionar» sobre la diferencia entre los resultados obtenidos por su partido en las elecciones generales y los de un mes después en las municipales y autonómicas.

Incidió en que las formaciones políticas «no se consolidan únicamente a base de éxitos» y subrayó que también en los «momentos difíciles» hay que asumir la responsabilidad de solucionar los problemas y «reconstruir» el partido.

«No nos vamos a rendir, no estamos contentos con los resultados, pero que nadie espere que nos rindamos», advirtió Montero, que recordó que antes de las generales se les «daba por muertos» y el 28 de abril les dio la posibilidad de ser determinantes para que haya un gobierno de progreso tanto en La Moncloa como en varias comunidades y «muchos» ayuntamientos.

La dirigente de Podemos espera que el PSOE sea «fuerte» para resistir a las «presiones» dirigidas a que el líder de Unidas Podemos, Pablo Iglesias, no esté en el Gobierno.

Ha subrayado que «la gente no quiere que el PSOE primero haga una campaña diciendo que va a haber un gobierno con la izquierda y, después, acabe mirando a la derecha».

Para Montero, el principal deber ahora de su organización es «pensar en España» para que haya ese gobierno progresista en España, sin evitar la autocrítica en el partido por los «malos resultados» del domingo en las municipales, autonómicas y europeas.

«Somos conscientes y no eludimos la situación en que nos encontramos», señaló y matizó que «la responsabilidad de la dirección estatal es intentar trabajar para el fortalecimiento del partido, pero pensar en España».

La coincidencia con el PSOE se ha dejado ver después de que los socialistas hayan «prestado» cinco senadores a Unidas Podemos para que la formación morada pueda disponer de grupo parlamentario propio en la Cámara Alta. La Mesa del Senado, que se reúne mañana, tendrá que dar el visto bueno a esta distribución de los senadores que ahora se sientan en el hemiciclo y la cual supone que habrá un grupo más que en la anterior legislatura, el de Ciudadanos. Unidas Podemos, que ha visto reducida su representación en la Cámara Alta a solo cinco escaños, y todos de senadores por designación autonómica, precisaba de otros cinco para formar grupo.