El ministro de Hacienda y Administraciones Públicas, Cristóbal Montoro, ha rechazado embarcarse en una "reinvención" del Estado para calmar las ansias independentistas catalanas, y ha descartado dotar a la región de un marco fiscal propio.

En una entrevista al periódico Wall Street Journal, informa EFE-Dow Jones, el ministro ha considerado que un régimen fiscal propio para Cataluña no ayudará necesariamente a la economía de la región y podría entorpecer la incipiente recuperación económica del país.

A su juicio, las disputas con Cataluña no han avivado la inquietud de los inversores internacionales porque el mercado entiende que la situación se va a solucionar y ha añadido que confía en que los políticos y la sociedad catalanes entenderán que la separación no va en el interés de ninguna parte.

"Hay que llegar a un entendimiento como pasa en muchas parejas. Mira, tú haces tu vida, pero no te conviene separarte. Nos llevamos regular, llevamos siglos así, pero nos queremos lo suficiente porque nos interesa estar juntos", ha dicho.

Algunos empresarios han opinado que un acuerdo para permitir que Cataluña recaude sus propios impuestos podría ser suficiente para convencer al presidente, Artur Mas, de que cancele la consulta.

Pero Montoro ha dicho que el sistema fiscal español ya es lo suficientemente complejo sin los cambios que requeriría este acuerdo.

El ministro no ha querido dar estimaciones precisas sobre el impacto de un posible acuerdo fiscal con Cataluña, que probablemente reduciría los recursos disponibles para el Gobierno central.

Dos comunidades autónomas españolas, el País Vasco y Navarra, que representan el 7% del PIB del país, recaudan sus propios impuestos y compensan al Gobierno central por los servicios suministrados, en materia como defensa y asuntos exteriores.

Otras regiones más pequeñas, como las Islas Canarias, tienen regímenes fiscales especiales.

Sin embargo, Cataluña es la comunidad autónoma de mayor tamaño en términos de PIB --representa cerca del 19%-- y de recaudación fiscal.

Montoro ha dicho que los cálculos económicos de los separatistas no tienen en cuenta todos los servicios que reciben del Gobierno central y ha añadido que la separación es contraria al proceso de integración dentro de la Unión Europea.

"El problema lo tiene en Cataluña el partido que gobierna porque su intención soberanista está perdiendo apoyo en favor de otros partidos políticos que son soberanistas y son de izquierdas (...) En lugar de decir a la gente lo que hay que hacer para salir de la crisis, se dedica a hacer un planteamiento soberanista donde compite peor", ha sostenido.

Un portavoz del Gobierno catalán no ha querido responder a los comentarios de Montoro.