Oriol Pujol Ferrusola ha ingresado este jueves, a las 16 horas, en el centro penitenciario de Brians 2, en Sant Esteve de Sesrovieres para cumplir la condena de dos años y medio de prisión impuesta por el cobro de comisiones ilegales para utilizar su influencia política em beneficio de empresarios amigos y el intento de amaño de adjudicaciones de ITV. Es el segundo miembro de la familia del expresidente de la Generalitat, Jordi Pujol, que ingresa en una cárcel. El primero fue su primogénito, Jordi Pujol Ferrusola, por el caso que instruye la Audiencia Nacional por la fortuna oculta en extranjero de la saga, pero fue como medida cautelar al no haberse celebrado todavía el juicio.

Oriol Pujol ingreso en Brians 2 de forma voluntaria, esta vez para cumplir la condena, y después de decidir con su abogado, Javier Melero, que no recurriría el auto de la jueza de la Audiencia de Barcelona que denegó la suspensión de la pena a cambio de trabajos en beneficio de la comunidad.

En los casos de ingreso voluntario en un centro penitenciario, el reo, en este caso Oriol Pujol, siempre accede a pie con el mandamiento de ingreso emitido por el juez y su documetación. De forma directa se le conduce al módulo de ingresos, donde los funcionarios de vigilancia penitenciaria le toman las huellas dactilares, se le hace una foto y se le practica un registro integral en una sala destinada a este uso. También se le retiran las pertenencias que están prohibidas tener en una cárcel, como dinero y móviles, que quedan en un depósito, según fuentes penitenciarias

Tras estos trámites burocráticos, el hijo del expresidente de la Generalitat será conducido a un de las celdas del módulo de ingreso, donde le visitarán, en primer lugar, el médico, y a continuación diferentes profesionales del equipo de tratamiento para conocer su situación, establecer sus necesidades y decidir el departamento más adecuado. En esta elección se tiene en cuenta que es la primera vez que entra en un centro peniteciario. Esta proceso puede durar unos cinco días, pero normalmente se completa en un par de jornadas.

Los primeros pasos

El Reglamento Penitenciario establece que la cárcel dispone de un máximo de dos meses para hacer una propuesta de clasificación. Es decir, el régimen penitenciario que distrutará y que irá modificándose a lo largo de su estancia en la prisión. Es la junta de tratamiento del centro quien eleva su propuesta de clasificación a la Direcció General de Serveis Penitenciaris de la Generalitat, que es quien toma una decisión definitiva, aunque el preso puede recurrirla ante el juez de vigilancia pentenciaria.

El tercer grado, lo que supone la semilibertad y acudir solo a dormir a la prisión, influye de manera especial la satisfacción por parte del condenado de la responsabilidad civil emanada del delito que ha cometido y fijada en la sentencia. En el caso de Oriol Pujol, ya ha sido satisfecha la indemnización. Sin embargo, con el segundo grado ya puede tener permisos a partir del cumplimiento de una cuarta parrte de la codnena. No obstante, no es un automatismo, según fuentes penitenciarias, sinó que está relacionado de cómo evoluciona el recluso, su conducta en el centro y otros criterios, como el apoyo familiar, el trabajo y el domicilio.

El hijo del expresidente de la Generalitat estaba trabajando como comercial en una empresa y tiene una situación familiar estable. Por lo tanto, esta situación juega a su favor para lograr el segundo y el tercer grado. Es decir, podría empezar a salir de la cárcel en unos meses para ir a trabajar.