El presidente de la Confederación Española de Asociaciones de Padres y Madres de Alumnos (Ceapa), Jesús Sánchez, ha augurado hoy un otoño "calentito" de movilizaciones de los sectores de la escuela pública contra la reforma educativa y los "recortes".

A su vez, Luis Carbonel, presidente de la Confederación Católica de Padres de Alumnos (Concapa), mayoritaria en la educación privada concertada, ha pedido que esas protestas no interfieran en la marcha normal de las clases ni supongan la pérdida de días lectivos y, por tanto, un perjuicio para los alumnos.

"Lo vemos con bastante pesimismo, creemos que este curso va a ser bastante complicado", ha comentado Sánchez a Efe, porque va a "continuar" la política de reducción de becas de comedor y de libros y las exigencias para obtenerlas serán mayores.

Sobre los requisitos académicos para la obtención y mantenimiento de las becas generales, ha comentado que se trata de una "clara selección" del alumnado, pues "no son un premio, son un derecho, algo que no entiende el ministro (José Ignacio Wert) todavía".

Carbonel ha lamentado, también declaraciones a Efe, que los libros de texto sigan sin bajar de precio como artículo de "primera necesidad", algo que es "inconcebible", y que el contenido cambie "tan constantemente" porque perjudica a quien no pueda adquirirlos.

"En estos momentos habría que estar muy atentos para facilitar ayudas a todas aquellas familias que no tengan suficientes ingresos", tanto para libros como comedores escolares, ha planteado.

Sobre las becas, ha defendido que no se pueden poner límites o barreras a quienes no tengan medios económicos para estudiar, pero, al mismo tiempo, los beneficiarios también tienen que poner de su parte un aprovechamiento "suficiente".