El Parlamento Europeo propuso ayer a los líderes de la Unión Europea (UE) ampliada que la ceremonia solemne de la firma de la primera Constitución europea se realice en Madrid, en honor a las víctimas de los atentados terroristas que tuvieron lugar en Madrid el pasado 11 de marzo.

Los líderes europeos tienen previsto concluir las negociaciones de la Constitución antes del 17 de junio, gracias al nuevo impulso europeísta propiciado por la victoria electoral socialista en España y por la necesidad de reforzar la cohesión interna europea tras el fuerte impacto que han tenido los atentados de Madrid.

La propuesta fue aprobada por 197 votos a favor, 173 en contra y 15 abstenciones, con el respaldo de los liberales, socialistas y parte del grupo popular. La decisión final corresponderá a los jefes de Estado y de Gobierno de la UE, que inicialmente se habían planteado efectuar la ceremonia en Roma, porque fue en la capital italiana donde hace 47 años se firmó el Tratado que creó la Unión Europea.

La iniciativa fue planteada por el eurodiputado italiano del grupo liberal y exalcalde de Roma Francesco Rutelli como acto simbólico para "reafirmar que la respuesta más eficaz al terrorismo y a su mensaje de miedo y barbarie reside en la fortaleza de las instituciones europeas y en el desarrollo de un proceso de participación civil, democrática y en libertad".

Además, Rutelli busca privar al primer ministro italiano, Silvio Berlusconi, del éxito político de actuar como anfitrión del histórico acontecimiento.