Bilbao. -- La mayoría de los partidos políticos han solicitado a la ilegalizada Batasuna que se sume a la petición de cuatro exdirigentes de ETA encarcelados, que han pedido en una carta a la banda terrorista que abandone la lucha armada. Según ha informado la Cadena SER, la carta ha sido ratificada por más de 100 presos etarras presos en diferentes cárceles españolas.El diputado del PNV Emilio Olabarria ha pedido a Batasuna que realice "la misma apelación" a ETA de abandonar la violencia que han hecho en una carta seis presos de la organización terrorista, entre ellos los antiguos dirigentes Francisco Mugika Garmendia, Ignacio Arakama Mendia, Iñaki Bilbao y Carlos Almorza.En una entrevista en Radio Euskadi, Olabarria ha destacado que se trata de "personas relevantes" en la organización terrorista, lo que confiere un "plus" de importancia a su "reflexión"."Los residuos de ETA deberían reflexionar", ha dicho el diputado del PNV, para quien la mayoría de los militantes de la organización terrorista han "metabolizado hace tiempo la convicción de que la victoria militar ante el Estado español es metafísicamente imposible".Olabarria sostiene que Batasuna debería pedir a ETA su "civilización" con el abandono del terrorismo y después modificar la ley de partidos para que esa formación dejara de ser ilegal y pudiera participar en política.Otegi pide que se pregunte a los presosEl portavoz de la ilegalizada Batasuna, Arnaldo Otegi, ha eludido valorar el contenido de la carta de los exdirigentes de ETA y se ha limitado a emplazar a quienes quieran saber "qué piensan los presos" a acudir a las cárceles y preguntarles.Otegi ha afirmado, en una entrevista concedida a Euskadi Irratia, que no valorará "filtraciones", y ha calificado de "escándalo" que una carta remitida por un grupo de presos a la dirección de ETA se publique en un medio de comunicación.El dirigente aberzale ha instado a los medios de comunicación a "entrevistar al colectivo de presos" en las cárceles para saber "qué piensan en realidad".El secretario general del PSE-EE de Vizcaya, José Antonio Pastor, ha dicho que la carta es un "motivo de esperanza" y ha mostrado su confianza en que esta petición "se generalice" entre los reclusos de ETA."Está demostrado de forma palmaria que a ETA se la puede derrotar y esperemos que haya el suficiente sentido común como para que esto sea un aldabonazo en la conciencia de mucha gente que sigue amparando y justificando" el terrorismo, ha añadido.En la buena direcciónEl secretario Ejecutivo de Libertades Públicas y portavoz de Justicia del PP en el Congreso, Ignacio Astarloa, ha aseverado que la carta firmada por seis históricos de ETA constituye una "buena noticia" y evidencia que la lucha contra la banda va "en la buena dirección". En declaraciones a Punto Radio, Astarloa ha asegurado también que su partido apoyará "cualquier acuerdo" que se pueda constituir para acabar con el terror, aunque ha advertido de que no permitirán que se modifique "ni una coma" del Acuerdo por las Libertades y Contra el Terrorismo. También se ha referido a la financiación del terrorismo y ha hecho hincapié en que "en este minuto de la historia" acabar con las fuentes económicas del terrorismo debería ser "uno de los objetivos prioritarios que tiene que tener el Estado de Derecho"."Un nuevo GRAPO"El coordinador general de Izquierda Unida, Gaspar Llamazares, también ha exigido a la ilegalizada Batasuna que se "desmarque definitivamente" de ETA, a la que ve "agonizante" y camino de convertirse "en un nuevo GRAPO", después de la carta que veteranos dirigentes de la banda han dirigido a la actual dirección. Llamazares ha subrayado que, después de la detención de la cúpula de la banda, esta misiva, que hoy publica el Diario de Navarra, es "la información más importante" que se ha divulgado en los últimos meses con respecto a ETA. A su juicio, la carta demuestra no sólo que la banda "pierde capacidad operativa", sino que también pierde "orientación política si es que alguna vez la tuvo". Por ello, considera que en este momento es "fundamental" mantener la lucha policial y legal contra el terrorismo, pero también "exhortar y hacer una exigencia política a Batasuna para que se desmarque de la violencia".