En unos momentos de críticas a los procedimientos empleados por la Guardia Civil para evitar la llegada de inmigrantes a Ceuta y Melilla, se ha divulgado en las redes sociales un vídeo en el que dos inmigrantes que se encuentran en aguas territoriales de España son arrastrados con una cuerda por el mar y trasladados a las inmediaciones del puerto marroquí. Sucedió en Melilla. Pese a que supone un sistema menos expeditivo e inhumano que el lanzamiento de pelotas de goma contra los inmigrantes que llegan a nado, supone también una forma peligrosa y de dudosa legalidad de establecer las barreras que rodean las ciudades españolas del norte de África, según han denunciado algunas fuerzas políticas y la oenegé Prodein.

En el vídeo se observa que a 10 o 15 metros del puerto de Beni Enzar les hacen soltarse de la embarcación y nadar hasta tierra marroquí. No hay ningún protocolo de expulsión con Marruecos ni nada parecido. El vídeo fue divulgado por Prodein y el Gobierno tuvo que responder con un comunicado. En ese comunicado se explica que los hechos pasaron el pasado 5 de agosto y que se trató de un "rescate", y que no se puede hablar de deportación ilegal, ya que "en ningún momento estas personas estuvieron en aguas españolas", según el comunicado.