El Partido Socialista ha ganado, tal y como se esperaba, una de las elecciones más polarizadas de la historia de la democracia española, tanto por lo que se refiere al eje ideológico -con la irrupción de un partido de ideología explícitamente de ultraderecha en el Congreso- como en lo referente a la cuestión nacionalista. Sin embargo, el PSOE (123) no alcanza los 176 diputados que conforman la mayoría absoluta ni sumando los escaños que ha obtenido Unidas Podemos (42). El pacto que ambos partidos habían considerado como la mejor opción no será posible -de primeras- a no ser que cuente con nuevos apoyos. Otra alianza que tampoco ha obtenido los escaños suficientes para gobernar en solitario es la de la triple derecha, con PP (66), Cs (57) y Vox (24), junto con Navarra Suma (2).

En Cataluña (15), Esquerra Republicana ha teñido el mapa de amarillo, ganando en tres de las cuatro provincias en detrimento de Junts per Catalunya (7) que perdió un diputado respecto a los últimos resultados de Convergencia.

Así pues, el 28-A nos ha deja la imagen de un Congreso multicolor, que requerirá llegar a pactos a partir del 29-A y sobretodo después del 26-M cuando ya se conozcan los resultados de las elecciones europeas y municipales.

PSOE Y UNIDAS PODEMOS: LA IZQUIERDA SE QUEDA CORTA

A pesar de la pérdida de casi la mitad de escaños por parte de Unidas Podemos, el impuso del PSOE ha hecho que la alianza de izquierdas haya crecido en nueve escaños respecto a las últimas generales. Así, de los 156 diputados que ambas formaciones sumaban en 2016 han pasado a los 165 actuales. Sin embargo, este crecimiento no ha sido suficiente como para superar el umbral del 50+1 y les ha dejado a 11 diputados de la mayoría absoluta.

PSOE Y CIUDADANOS: EL MÁS EVITADO, PERO EL MÁS VIABLE

"Con Rivera, no!", gritaban ayer los militantes y simpatizantes socialistas concentrados ante la sede de Ferraz. A pesar de no ser precisamente la alianza favorita de Sánchez, es la más viable por cuestión de números. PSOE y Ciudadanos suman 180 diputados, superando así por cuatro escaños la mayoría absoluta. Sin embargo, la negativa flagrante del líder naranja de pactar con Pedro Sánchez -por considerarlo un traidor- hace difícil el pacto.

PP, Cs y VOX: LA TRIDERECHA DE COLÓN NO CUMPLE CON LAS EXPECTATIVAS

La alianza de derechas compuesta por los populares, liberales y ultraderechistas fue la más temida, sobretodo durante los últimos días de campañas y movilizó una parte importante del electorado, tanto a favor como en contra. Una parte importante del crecimiento del Partido Socialista se debe a la transferencia de "voto útil" de partidos como Podemos. Sin embargo, a pesar del auge de Vox, la derecha se ha quedado lejos de mayoría. La suma de los escaños de estos partidos, junto con los dos que ha conseguido Navarra Suma se queda en 149 diputados, 27 por debajo de la mayoría absoluta.

PP, Cs y NA+: LA ALIANZA MÁS CÓMODA PARA LOS NARANJAS

Pablo Casado dejó claro en la vigilia de las elecciones que estaba dispuesto a gobernar con Vox si era necesario. Ciudadanos, por su parte han sido más discretos y han evitado confirmar directamente si gobernarían o no con los ultraderechistas, tendiéndole la mano -eso sí- a los populares en repetidas ocasiones. Sin embargo, si la suma de la derecha con Vox queda lejos de la mayoría, sin los de Abascal la aspiración de lograr una investidura de derechas queda descartada por completo: Cs, PP y Navarra Suma se quedan con 125 escaños.

PSOE, UP, ERC, JxCAT, PNV, CC-PNC, EH Bildu, PRC y COMPROMÍS: CON LOS INDEPENDENTISTAS

Esta opción de gobierno ganaría con una mayoría aplastante, pues la suma de PSOE, PP y los partidos regionalistas e independentistas -ERC (15), JxCat (7), PNV (6), EH Bildu (4), CC-PNC (2), PRC (1) y Compromís (1)- llega a los 199 diputados. Sin embargo, esta alianza queda prácticamente descartada ante la posibilidad de Pedro Sánchez de gobernar en solitario en la segunda vuelta. El líder socialista dejó claro durante la campaña y sobretodo durante en los debates que no pretendía pactar con los independentistas ni ceder ante sus demandas.

PSOE, UP, PNV, CC-PNC, PRC: SIN Esquerra, JxCAT y EH Bildu

Esta opción sería mucho más comoda para Pedro Sanchez ya que no tendría que atender a las demandas de Esquerra, Junts per Catalunya y EH Bildu. Sin embargo, la opción de gobernar con Unidas Podemos y los partidos regionales se queda a un escaño de conseguir la mayoría absoluta y necesitaría una abstención de un diputado independentista para poder ser investido en segunda vuelta.