Albert Rivera anunció en febrero que en ningún caso pactaría con Pedro Sánchez tras las generales del 28-A. El martes, después de que el secretario de Organización del PSOE, José Luis Ábalos, mostrara su predilección a llegar a un acuerdo con los naranjas, mejor que con Podemos, Rivera se vio en la necesidad de descartar cualquier entendimiento con los socialistas. El problema de credibilidad que el presidente de Ciudadanos arrastra por haber respaldado la investidura de Mariano Rajoy en el 2016, después de insistir en que nunca lo haría, lo llevó a dar una vuelta de tuerca a su promesa en un mitin en La Coruña: ofreció un gobierno de coalición a Pablo Casado «para echar a Sánchez». Fuentes de los populares consideran que es una «estrategia» para alejarse lo máximo del PSOE y demuestra el «desconcierto» de los naranjas por el auge de Vox en los sondeos, un temor que los conservadores comparten, como han mostrado cuando han pedido a los ultras que no se presenten en las provincias de la España interior.

En Génova consideran que el ofrecimiento de Rivera «llega tarde», justo cuando se han cerrado los plazos para registrar las listas, pero ven el lado positivo. En la dirección del partido creen que con su iniciativa el político catalán le ha dado «un arreón al centro» al PP, después de unos meses en los que su imagen se había «derechizado», admiten, por el pacto con los ultras en Andalucía y el endurecimiento del discurso.

«DIFERENCIAS CLARÍSIMAS»

El vicesecretario de Organización, Javier Maroto, recordó que estas últimas semanas Casado ofreció a Ciudadanos hacer «listas compartidas» en el Senado y candidaturas únicas en territorios como el País Vasco. Y los naranjas lo descartaron en varias ocasiones.

Así las cosas, Casado, en un acto en Melilla, dejó claro que aceptaría un «gobierno de coalición entre las formaciones de centro-derecha», sin mentar a Vox, en el que se ve como presidente. «Yo creo que Albert Rivera sería un excelente ministro de Exteriores, que llevaría mucho mejor [que el actual, Josep Borrell] la campaña contra las mentiras de México y los senadores franceses», soltó. «Pero antes de hablar de gobiernos, vamos a sacar el máximo de escaños», añadió antes de volver a pedir que se concentren los votos en las siglas del PP.

La propuesta de adjudicar Exteriores a Rivera en ese posible gobierno de coalición no gustó a Villegas. «No es tiempo de ir de sobrados (...) ni de repartirse cargos», afirmó en La Sexta.