El juez de refuerzo del Juzgado Central de Instrucción número 6, Joaquín Gadea, ha acordado prisión provisional comunicada y sin fianza para el tesorero de la Comisión Islámica de España (CIE), Mohamed Hatem Rohaibani Sleik (61 años), al que imputa un delito de pertenencia a organización terrorista y otro de financiación del terrorismo, según fuentes jurídicas.

Esta decisión llega después de que haya sido puesto a disposición judicial, y tras tomarle declaración, Hatem Rohaibani Sleik es uno de los tres detenidos en la operación policial desarrollada este martes. Los otros dos, entre los que se encuentra el presidente del CIE, Ayman Adlbi, quedaron en libertad a la espera de que el magistrado decida si les cita para declarar.

Estas mismas fuentes jurídicas, señalan que el tesorero podría estar colaborando con una ONG que estaría facilitando ayuda económica a facciones yihadistas que son filiales o que han servido a los intereses de Al Qaeda en Siria. Así, formaría parte de una red de personas que se coordinaron durante años para organizar y trasladar desde España dinero a esas facciones.

Así recaudaban fondos

Para esa operativa de recaudación de fondos, se creó una dinámica fraudulenta con el fin de obtener sumas de dinero de decenas de personas residentes en España y que en su mayoría desconocían quienes eran los beneficiarios últimos del dinero que aportaban en campañas de caridad.

Según esta fuentes, tanto el detenido como los otros dos investigados se valieron de su posición de influencia en la gestión del Centro Islámico Mezquita Abu Bakr en Madrid, ubicada en la calle Anastasio Herrero. De hecho, el tesorero habría utilizado recursos de varias asociaciones musulmanas interconectadas entre sí y ubicadas en ese centro para recaudar esos donativos bajo la apariencia de ayuda humanitaria a huérfanos.

Vinculación terrorista

Ese dinero recaudado, o parte de él, se hacía llegar con posterioridad de forma opaca a una ONG denominada Organización Humanitaria Al Bashaer, que esta vinculada a la organización terrorista yihadista Yeish al Islam, que ha llegado a operar como filial de Al Qaeda en Siria.

Este mismo jueves, la Policía Nacional ha emitido un comunicado informando de la detención de esas tres personas, dos en Madrid y una en Santa Cruz de Tenerife, por su presunta participación en un delito de financiación del terrorismo, y apuntando que la investigación, declarada secreta, permanece aun abierta.

Dinero para muyahidines

La investigación comenzó hace dos años cuando los especialistas en la lucha antiterrorista, a raíz de una operación realizada en 2019, tuvieron conocimiento de la existencia de una red de financiación que desde España y valiéndose de esa ONG que tiene actividad en la zona de conflicto sirio, enviaba dinero para financiar a combatientes yihadistas de Al Qaeda.

La Policía indica que tras las pesquisas iniciales, los agentes comprobaron como dichas actividades delictivas se desarrollaban por personas vinculadas a un centro islámico de Madrid. Y que parte de la recaudación era destinada a sufragar los gastos de un centro escolar para niños huérfanos situado en zona de conflicto, cuyas actividades se centraban en el adiestramiento de futuros muyahidines.

La educación impartida se centraba en la enseñanza más radical de la sharía y el entrenamiento de los niños en la lucha armada, motivándolos a continuar la actividad terrorista de sus padres muertos en combate.