Todos expulsados. Desde que trascendió el escándalo de las tarjetas opacas de Caja Madrid, el PSOE dijo que sería “duro” y “contundente” con los 16 militantes que formaron parte de la entidad y que disfrutaron de estos instrumentos para todo tipo de gastos sin justificar. El líder socialista, Pedro Sánchez, que enarbola la bandera de la limpieza y la regeneración democrática, no quiere dar ninguna impresión de tibieza ante este escándalo. Así que este mismo martes, el partido ha comunicado que tras concluir la investigación interna ha decidido echar a los 10 afiliados que aún no habían presentado su baja de forma voluntaria.

La contundencia de Sánchez y su número dos también ha causado malestar entre los afectados. El exministro Virgilio Zapatero, que fue vicepresidente de Caja Madrid entre el 2010 y el 2012 (tiempo en el que gastó 36.000 euros con la tarjeta, de los que asegura haber devuelto 28.000), envió la semana pasada una carta al secretario general en la que le tachaba de “justiciero que, sin conocer los hechos, ya los prejuzga” y le acusaba de reducir la política a un juego de “marketing y titulares”.

Más duro aún ha sido el sociólogo Ignacio Varela. Integrante del Consejo de Administración de Caja Madrid entre el 2005 y el 2006 (gastó 35.700 euros), Varela señala incluso que usó la tarjeta para pagar actos del PSOE. “Efectivamente, como ya he admitido, realicé gastos de naturaleza privada. También otros: por ejemplo, los que realicé para pagar determinadas actividades del partido con pleno conocimiento y consentimiento de sus dirigentes. No sé en qué categoría englobarlos”, escribe en la carta, enviada a la dirección socialista y publicada por el Huffington Post.

Los otros expulsados este martes son: Ángel Gómez del Pulgar, Joaquín García Pontes, Miguel Muñiz de las Cuevas, Gonzalo Martín Pascual, Enedina Álvarez, Miguel Ángel Abejón, José María de la Riva y José María Arteta.

LA BONIFICACIÓN

El escándalo también ha servido para que se conocieran los términos de la hipoteca que suscribió Sánchez con Caja Madrid. Como concejal del ayuntamiento de la capital, el ahora secretario general formó parte junto a otras 320 personas de la asamblea de esta entidad entre el 2004 y el 2009, y varias informaciones han señalado que su expresidente, Miguel Blesa, ofrecía créditos ventajosos a los asambleístas. Sánchez anunció el lunes que publicaría los términos de su préstamo; varias horas después divulgó el contrato a través de la web del PSOE. En él consta que firmó una hipoteca en el 2005 por un capital de 293.700 euros, con un tipo de interés del Euríbor más el 1,75%. Se trata de un modelo algo por encima del precio de mercado en ese momento, pero el propio Sánchez admite una bonificación de 60 euros al mes por ser integrante de la asamblea. “El resultante ofrece condiciones similares a las del mercado en el 2005”, concluye el PSOE. En cualquier caso, esa bonificación se le dejó de aplicar en el 2008, cuando amplió la hipoteca, hasta los 318.600 euros, con un interés del euríbor más 1,25%.