El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, se ha comprometido hoy a impulsar, en la recta final de la legislatura, la mejora de la calidad de la democracia, y está dispuesto a debatir con los demás partidos cuestiones como la reducción de aforados en España.

Rajoy ha hecho de esta agenda de regeneración el principal compromiso político que le queda al PP hasta las próximas generales, tras dar por hecho que se ha encarrilado la recuperación económica y que se verá asentada con reformas pendientes como la fiscal.

El jefe del Ejecutivo ha hecho estas reflexiones en la reunión del Comité Ejecutivo Nacional del PP, tras la que el partido ha anunciado su disposición a discutir, no sólo internamente sino también buscando acuerdos con el resto de fuerzas políticas, nuevas medidas dirigidas, ha dicho la secretaria general, María Dolores de Cospedal, a mejorar la calidad del sistema democrático.

Ha sido Rajoy el que ha puesto encima de la mesa cuestiones que, como ha apuntado Cospedal en rueda de prensa, están actualmente en el debate político, como la reducción del número de aforados, aunque también otras ideas que defiende el PP como la elección directa de los alcaldes -que gobierne siempre la lista más votada en los municipios- o la reducción de diputados y municipios.

El PP plantea la cuestión de los aforamientos una semana después del intenso debate que se produjo en el Congreso, con motivo de la reforma legal para el aforamiento del Rey Juan Carlos, con prácticamente toda la oposición advirtiendo del número excesivo de aforados en España, cerca de 10.000.

La número dos de los populares, que ha recordado que la mayoría de los aforados son fiscales y jueces, ha explicado que el partido abordará este asunto en la Escuela de Verano que celebra la semana que viene, los días 10, 11 y 12 de julio, en la Comunidad de Madrid.

El PP quiere estudiar detenidamente los aforamientos, pero también explicar a la ciudadanía en qué consisten -"clarificar el concepto", en palabras de Cospedal-, porque por ejemplo, ha apuntado, los aforados tienen una instancia judicial menos a la que recurrir.

Otra cuestión a estudiar sería la reducción de diputados autonómicos y también la de municipios, aunque en este último caso la secretaria general ha aclarado que el PP no tiene intención, en primera instancia, de recortar el número de ayuntamientos, sino que quiere estudiar si es bueno que haya más o menos y las consecuencias económicas en cada caso.

En el ámbito municipal, no obstante, hay otra medida de mayor calado que quiere abordar el PP: la elección directa de los alcaldes, una idea que ha defendido en otras ocasiones y que supondría permitir gobernar un municipio a la lista más votada aunque no tuviese mayoría absoluta.

El PP, en resumen, quiere estudiar estas y otras cuestiones para "mejorar la calidad democrática" al mismo tiempo que se "continúa" con las mejoras económicas y sociales que, según los populares, ya se están notando tras muchos años de grave crisis.

Y el partido pretende en este contexto recuperar la confianza de los ciudadanos y, "desde luego" según Cospedal, de sus propios votantes, de cara a las próximas citas con las urnas y tras la caída registrada en los comicios europeos.

"Éste sigue siendo el primer partido político" del país. "Somos un referente de confianza y credibilidad", ha añadido la secretaria general.

Con este debate han quedado en segundo plano en la reunión de hoy cuestiones como la reforma fiscal recientemente presentada por el Gobierno o la del sistema de financiación autonómica.

En el caso de la reforma fiscal, Rajoy ha admitido que es susceptible de sufrir cambios si se aceptan algunas propuestas de agentes sociales y otros partidos, que no ven con buenos ojos, por ejemplo, que tributen las indemnizaciones por despido.

Según Cospedal este punto se podría modificar, pero lo que no va a cambiar es la "piedra angular" de la reforma, la bajada de impuestos.

Y en cuanto a la reforma de la financiación autonómica, que ha quedado aplazada según admitió la semana pasada el ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, ni siquiera ha sido mencionada por Rajoy.

Algunos barones consultados por Efe han admitido que no conviene abrir el melón de la financiación a un año de las autonómicas, aunque otros líderes regionales, más preocupados por sus cuentas, han admitido que habrían preferido hacerlo ya.