El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, ha destacado hoy el papel jugado en España por la Constitución, "la de la Concordia", para construir, hace treinta años, "no una democracia y un Estado cualquiera, sino un Estado miembro de la Unión Europea".

Rajoy ha hecho estas manifestaciones en la laudatio del Premio Carlos V que ha recibido hoy el presidente de la Comisión Europea, José Manuel Duaro Barroso, en el Monasterio de Yuste (Cáceres), de manos del Príncipe de Asturias.

"Queríamos y queremos embarcarnos en el barco europeo y participar en su navegación, darle rumbo y sentido, y enfilar a toda máquina hacia la fijación de las reglas de una gobernanza mundial basada en los principios de libertad, justicia, cohesión y solidaridad que son precisamente los principios sobre los que se asienta la Unión Europea", ha dicho Rajoy.

Para Rajoy, la entrega del Premio Carlos V a Jose Manuel Durao Barroso "constituye un acto de europeidad y, al mismo tiempo, una invitación a la reflexión sobre Europa y su construcción", en la que el galardonado ha jugado "un papel de primer orden durante la última década".

Tras recordar la visión "universal" y europeísta que tuvo en su momento Carlos V, Rajoy ha destacado, en presencia del primer ministro portugués, Pedro Passos Coelho, que "no puede entenderse ni la España de hoy ni el Portugal de hoy sin Europa".

También ha recordado que España y Portugal estuvieron ausentes en el momento fundacional de la construcción europea y a causa de ello en la Península Ibérica Europa "no sólo ha sido una idea, también y, sobre todo, fue un sueño y una motivación".

Por ello, ha insistido en que Europa fue el argumento de la esperanza con que españoles y portugueses quisieron "salir de la noche de los tiempos y hacer la transición hacia la democracia".

A este respecto, se ha referido a la "Constitución de la Concordia", herramienta con la que España resolvió ordenar su convivencia y que se elaboró desde el consenso, "y en la que cabemos todos y constituye la mejor garantía para avanzar y alcanzar la justicia, la prosperidad y el bienestar material de todos los españoles".

Rajoy ha destacado que este "barco europeo" al que en 1986 se subieron españoles y portugueses necesita de personas para guiarlos y durante los últimos diez años "el piloto de esta nave europea ha sido José Manuel Durao Barroso, cuya trayectoria política simboliza de manera ejemplar el paso del navegar hacia Europa al navegar de Europa, de soñar en Europa a hacer Europa".

A su juicio, Jose Manuel Durao Barroso ha ensanchado los límites de Europa hasta sus actuales veintiocho miembros, ha visto nacer el Tratado de Lisboa, verdadero pacto refundador de la Europa reconciliada tras la caída del Muro y ha afrontado la mayor crisis económica financiera de las últimas décadas reforzando y ampliando la zona euro.

Además, ha destacado que el galardón también simboliza el protagonismo de una generación de mujeres y hombres portugueses y españoles en la conducción y navegación de Europa, "que personificaron la vuelta a Europa y el deseo de quedarse para siempre".

Según Rajoy, Durao Barroso ha contribuido con su compromiso, su trabajo y su talento a hacer realidad un anhelo compartido por la mayoría de españoles, a irreversibilidad del proyecto europeo porque "ya no hay marcha atrás, lo único que queda es caminar hacia delante".