Mariano Rajoy lanzó ayer en Barcelona, en vísperas del inicio de la campaña electoral, un mensaje de conciliación al presidente de la Generalitat, Pasqual Maragall, y al PSOE tras varias semanas de durísima confrontación a raíz del encuentro de Josep Lluís Carod-Rovira con ETA. El candidato popular a la Moncloa reclamó además a todas las fuerzas políticas que rectifiquen sus "salidas de tono" de los últimos días, si bien omitió que la mayor parte de los insultos han partido del PP y presentó a su partido como víctima de las provocaciones de los socialistas. Rajoy también aprovechó para presentar sus propuestas para la pequeña y mediana empresa.

En su estrategia de mano tendida, Rajoy expresó "respeto" al tripartito catalán, dijo que el PP "nunca ha dudado de la legitimidad" de ese acuerdo. En un tono mucho más moderado del que suele hacer alarde, muy alejado de las soflamas de José María Aznar, el candidato reclamó ayer a todas las fuerzas políticas que pongan fin al clima de crispación. "Todos debemos cuidar lo que decimos y ponernos en el lugar del otro", afirmó.

Pese a sus pretensiones de ecuanimidad, no evitó justificar al PP. Así, dijo que las declaraciones del presidente de Murcia, Ramón Luis Valcárcel, que tachó a Maragall de bebedor, "pudieron haber sido mejores", pero añadió que "tampoco se puede decir a los ciudadanos de una comunidad que despilfarran el agua", en alusión a unas críticas de Maragall a Murcia.

El candidato hizo estas consideraciones en una conferencia en la sede de Foment de Treball, donde presentó ayer ante la patronal sus propuestas electorales dirigidas a las pequeñas y medianas empresas (pymes). Rajoy se comprometió a crear un tipo "superreducido" del impuesto de sociedades, que se fijará en el 20% y beneficiará a las empresas que facturen menos de un millón de euros, que podrán aplicarlo en los primeros 30.000 euros de beneficio.

También ofreció extender a más firmas el tipo reducido ya existente del 30%. Rajoy se comprometió también a revisar, en sus primeros 100 días de gobierno, las tablas de amortizaciones de las empresas para mejorar el tratamiento fiscal.