La pretensión del arzobispo de Toledo, Antonio Cañizares, de lograr que la comisión permanente del episcopado se pronunciara sobre la necesidad de elaborar un documento sobre la unidad de España no ha prosperado. No obstante, el portavoz de los obispos, Juan Antonio Martínez Camino, que calificó ayer este debate de "asunto importante", señaló que ello no significa que "ese problema" se minusvalore.

El portavoz aseguró, tras la reunión de la permanente, que la cuestión no se había abordado porque "no figuraba en el tema del día" ni "nadie lo había pedido", y agregó que en el capítulo de ruegos y preguntas "nadie ha sacado el tema". Fuentes del episcopado explicaron que Cañizares no planteó el tema porque el presidente de la Conferencia Episcopal, el cardenal Antonio María Rouco Varela, quiere reservarse la iniciativa sobre este debate y promoverlo cuando lo crea más conveniente.

Sobre la nota episcopal que recomienda a los cristianos que acudan a votar, pero se comprende que haya quien se abstenga ante las insuficiencias de los programas políticos, Martínez Camino dijo que "hay que colaborar al bien común y ello exige esfuerzo y sacrificio y si es preciso dedicar un tarde del domingo a ello".